La leyenda continúa: Sergio Ramos cumplirá 500 partidos ante Osasuna

Sergio Ramos cumplirá este sábado –ante Osasuna– 500 partidos con el Real Madrid. El capitán blanco entrará a formar parte de un selecto club muy reducido en el que se encuentran grandes mitos del madridismo como Hierro, Gento, Santillana, Casillas o Raúl. Hace ya 11 años desde que el Santiago Bernabéu vivió el debut del que en el futuro se convertiría en su héroe con goles inexplicables que solo él es capaz de marcar.

Fue el 10 de septiembre de 2005, en un partido de Liga ante el Celta en el coliseo madridista. Por aquel entonces tenía 19 años y una leyenda por escribir en el club blanco. Llegaba como uno de los defensas más prometedores dispuesto a hacer historia en el Real Madrid y el club no dudo en pagar 27 millones de euros por él. Mucho ha llovido desde entonces. Ese joven defensa que llegó como lateral derecho se ha convertido en el mejor central del mundo.

Lejos queda aquel joven de Camas que llegó al equipo de Concha Espina listo para triunfar. 4170 días después es todo un ídolo del madridismo y cuenta con un palmarés envidiable. Además luce el brazalete de capitán del club con más copas de Europa de la historia del fútbol al ser el jugador con más antigüedad en el Madrid. Siempre ha mostrado su liderazgo como capitán tanto dentro como fuera de los terrenos de juego.

Desde entonces suma ya 499 partidos y este sábado celebrará los 500. Ha marcado un total de 66 goles, aunque algunos de ellos valen más que otros, como el de Lisboa. Esta temporada ha salvado al equipo en varias ocasiones, convirtiéndose en el hombre del gol sobre la bocina. Tanto es así que en Cádiz le han dedicado una chirigota en su honor. La presente campaña es la más goleadora de su carrera.

13 títulos como madridista

Sergio Ramos ha conquistado el corazón del madridismo con goles y títulos. Desde que aterrizara en el Real Madrid ha logrado un total de 13 títulos. Se ha proclamado dos veces campeón de la Champions, donde su aportación ha sido decisiva. En Lisboa anotó el gol del empate en el 93 para forzar la prórroga ante un Atlético desfondado que se vio superado por un gran Real Madrid. Dos años más tarde, en Milan se encargó de abrir la lata con el primer gol.

A raíz de eso se proclamó dos veces campeón del mundo de clubes. En Marruecos, frente a San Lorenzo, marcó el camino de la victoria con otro de sus goles decisivos. Sin embargo ahí no termina la historia. Sergio fue vital para vencer al Sevilla en la Supercopa de Europa esta temporada, donde forzó la prórroga con un tanto en el descuento, para que a la postre Carvajal le diera su segundo trofeo de este calibre.

Además de esas dos Supercopas de Europa tiene dos Copas del Rey, ambas frente al eterno rival en Mestalla. A ello hay que sumarle dos Supercopas de España. Pocos pueden presumir de haber aportado tantos trofeos a las vitrinas del Real Madrid. Su palmarés es extenso y envidiable. Pero el de Camas todavía no ha dicho su última palabra, quiere retirarse de blanco y conquistar más títulos de blanco.