Otra hazaña de Nadal: resiste ante Aliassime y confirma su cita con Djokovic
Rafa Nadal superó a Auger-Aliassime en un auténtico partidazo en Roland Garros. El español se medirá a Djokovic en cuartos
Así te hemos contado el directo de Nadal - Auger-Aliassime
Rafa Nadal ya está en cuartos de final de Roland Garros. En un encuentro complicadísimo, sin el nivel deseado de su lado y con un gran Felix Auger-Aliassime opositando a la victoria, el tenista español necesitó tirar de su lado más resistente, física, tenística y mentalmente, para vencer (3-6, 6-3, 6-2. 3-6, 6-3), aceptar la cita con Novak Djokovic en cuartos de final y darle al público la final anticipada que pedía desde el sorteo del cuadro. Nadal fue de nuevo épico, durante las casi cuatro horas y media de contienda, y en el momento clave sacó un as de la manga, con golpes que llevaron al éxtasis a un público ya en pie sobre sus asientos de la Chatrier.
Ganar a Nadal en Roland Garros sólo está al alcance de los elegidos que pueden mantener un nivel de matrícula durante cinco sets. Felix Auger-Aliassime sublimó su versión hasta colocarse en disposición de lograrlo, pero coincidiendo con la reacción del rey de la arcilla, acabó convirtiéndose en una nueva víctima del mejor jugador de la historia en su tierra de París.
Día nublado y pesado en París, con Djokovic ya en cuartos esperando rival del duelo estrella entre Rafael Nadal, el rey con sensaciones recuperadas, y Felix Auger-Aliassime, aspirante desde el cuarto puesto de la Race 2022. El partido esperado por todos se encontraba a la espera de que Rafa cumpliera con su cometido en un encuentro trampa y que pronto mostraría las dificultades que iba a encontrar Nadal camino de la victoria.
Aliassime, físicamente poderoso en sus golpes y sus desplazamientos, empezó intimidando con un servicio que sacaba adelante con dificultad y puntualidad, ante un Rafa que perdía sus seis primeras pelotas de break, tres por juego. No perdonaría Felix, con un Nadal demasiado fallón con la derecha, para adelantarse con un break que apagaba el partido tanto como el cielo que decoraba el complejo parisino.
Aliassime golpea primero
La historia sería todavía peor en un primer set de pesadilla. Rafa no daba con la tecla al servicio y con sus golpes, demasiado cortos, quedando a merced de un Aliassime que aprovecharía la oportunidad para doblar la apuesta, en forma de nuevo break, y asomarse al cierre con un 5-1 que convertía la Chatrier en un vagón de silencio dentro del complejo de Roland Garros. Nadal maquillaría el set, rompiendo y dando un mínimo de esperanza que sacudió Felix, de nuevo con el servicio como arma, para cerrar el 6-3 definitivo del primer parcial.
Urgía reaccionar y encontrar sensaciones, y al tiempo que el sol amagaba con asomarse, Nadal empezaba a cuadrar su derecha y, sobre, todo, minimizar los errores no forzados que le estaban perdiendo. Era un día para sufrir de lo lindo para poder después disfrutar, y Rafa tuvo que lidiar con nuevas oportunidades de break de su rival, que casi se pone con set y break arriba. Lo evitó el genio balear, que esperó al momento justo para dar el golpe definitivo que le devolviera al partido.
Los juegos pasaron con igualdad total en el marcador, aunque a los puntos Rafa era algo superior. Estas oportunidades perdidas le habían condenado en el primer set, pero en el segundo iba a ser el balear el que diera la estocada. Fue en el octavo juego, con Auger-Aliassime aflojando –por fin– al saque, y dejando que el español quebrara e igualara la contienda. Salía el sol en la Chatrier y con él el mejor Nadal.
Nadal reacciona ante el mejor Aliassime
La inercia ganadora de Rafa hizo que viéramos, por momentos, al mejor Nadal sobre la pista central. Profundo con la derecha e incisivo en cada golpe, el balear no pudo romper a la primera en el tercer set pero a la segunda, en su tercera oportunidad, iba a tomar una ventaja clave para adelantarse por primera vez en el partido. El reloj iba ya más allá de las dos horas de juego y las cosas habían tardado en ponerse en su sitio, pero Rafael Nadal Parera ya iba ganando en Roland Garros.
Nadal no cedió una sola pelota de break, con un saque que desde el 5-1 había pasado a ser territorio prohibido para Auger-Aliassime. El canadiense seguía comportándose como un digno rival, pero la subida de nivel de Rafa había convertido en inerte el repertorio del pupilo de Toni Nadal. Un segundo break para Rafa colocaba el tercer parcial visto para sentencia y el Nadal-Djokovic a sólo un set de convertirse en realidad.
Aliassime, meritorio como el que más, tanto como para hacer dudar de la victoria del trece veces campeón en París, volvió a adelantarse en el cuarto set, haciendo sufrir a un Nadal que se encontró perdido ante la rapidez y la potencia, con un servicio diferencial en porcentaje, de un jugador llamado a estar diez años entre los mejores. Un solitario break marcaba la diferencia en el cuarto y nos emplazaba al quinto, con la emoción a flor de piel, para decidir al ganador de una nueva batalla para el museo de la historia reciente de Roland Garros.
Rafa Nadal es inmortal
Nadal no estaba siendo el mejor Nadal, pero la confianza de que en el momento clave apareciera su versión diferencial esperanzaba al aficionado. Costó mucho, mucho, porque Aliassime no lo puso fácil. Así pasaron los juegos entre la agonía y los destellos de superclase de ambos contendientes a la victoria. Djokovic sonrió al ver cómo las cuatro horas pasaban en el reloj del partido del que saldría su rival, pero volvería a fruncir el ceño al ver como en el octavo juego, ya al límite de la decisión, Rafa sacaba su varita y con cuatro puntos majestuosos lograba el break que amagaba con ser decisivo.
A partir de ahí, el cierre extraordinario a una nueva hazaña de Rafa en París, su territorio, el lugar en el que quiere reescribir la historia, recuperar el trono y hacerse con la Decimocuarta. El servicio de Nadal fue definitivo para cerrar una contienda memorable y colocar al rey de la tierra en disposición de escalar el Tourmalet y vencer una vez más a la lógica. Rafael Nadal Parera ya está en los cuartos de final de Roland Garros.
Temas:
- Rafael Nadal
- Roland Garros