El oasis que puede aclarar el futuro de Marc Márquez
Marc Márquez está viviendo un auténtico oasis esta temporada. El piloto de Repsol Honda comenzó muy fuerte el año, estando al 100% físicamente y con ganas de volver a pelear por el campeonato del mundo de MotoGP, pero tras ocho carreras llega al parón de verano lesionado y otra vez con la mente puesta en descansar y recuperarse, mas que pensando en su futuro. El ilerdense lleva 14 caídas en lo que va de Mundial y cero puntos en cinco carreras disputadas los domingos. Todos los puntos que tiene los ha conseguido en las carreras al sprint.
Alemania fue un punto de inflexión para el ocho veces campeón del mundo. Marc llegaba allí con esperanzas de poder dar un salto adelante e intentar pelear, al menos, por el podio pero acabó siendo el peor fin de semana del curso con hasta cinco caídas en tres días, unas por culpa suya y otras por culpa de la moto. Pasó de soñar con el podio a tener que retirarse en su circuito fetiche sin correr el domingo.
Luego vino Assen, al cual llegó ya mermado físicamente por las cinco caídas en Sachsenring pero aún así se subió a la moto para intentar ayudar al equipo a recabar datos de cara a poder trabajar en estas cinco semanas de parón. Todo esto ha desatado los rumores de una posible marcha de Márquez al término de este curso. KTM ha sonado como alternativa si el de Cervera se terminara marchando de Honda, pero el propio piloto desmintió haberse ofrecido a la marca austríaca.
El parón le ha venido como anillo al dedo a Marc Márquez para recuperarse. A día de hoy, por la cabeza del español no pasa otra cosa que no sea utilizar el verano para descansar, recuperarse de la lesión y rehacerse «físicamente y mentalmente». «Este mes y medio me viene como anillo al dedo. Necesito rehacerme físicamente y mentalmente porque estoy en uno de los peores momentos de mi carrera deportiva, pero ayuda que estoy en uno de mis mejores momentos a nivel personal. Es lo único con lo que me apoyo y me agarro para seguir luchando e intentar darle la vuelta a esta situación», comentó tras anunciar su retirada del GP de Holanda.
El futuro, en manos de Honda
Por el momento, el ocho veces campeón del mundo no se plantea una salida de Honda y se mantiene fiel a la marca que le dio la oportunidad de dar el salto a MotoGP pese a estar en sus horas más bajas. Marc está muy agradecido por todo lo que le dieron cuando estuvo lesionado y lo que le aguantaron, y ahora él está respondiendo. Pero la paciencia tiene un límite y todo podría cambiar en el futuro. Si la Honda sigue siendo una moto tan poco competitiva más adelante, la situación del de Cervera podría cambiar ya que su objetivo es volver a lo más alto.
Desde la marca del ala dorada dejaron la puerta abierta a que salga su estrella este verano. Alberto Puig reconoció que están «en la mierda» y dijo que si el catalán no están contento, «Honda no es una compañía que quiera tener a gente que no esté contenta dentro de Honda». El propio Márquez explicó que no iba a tomar ninguna decisión sobre su futuro durante este parón porque considera que no es bueno tomar decisiones en caliente.
«Tiene que pasar el tiempo porque una de las cosas que me han enseñado, y que creo que es bueno, es no tomar decisiones en caliente ni decir cosas en caliente, pero está claro que todos los pilotos de Honda estamos lesionados…», dijo el del Repsol Honda. Tanto Rins como Mir se lesionaron durante el GP de Italia y ambos se perdieron esa prueba y la de Holanda. El primero se rompió tibia y peroné tras una fuerte caída y el segundo cuenta con «fuertes molestias en el quinto metacarpiano de la mano derecha» como consecuencia de otra caída. Nakagami también sufrió una caída en Alemania pero no sufrió ninguna lesión. El japonés es el único que todavía no se ha lesionado. Todo esto podría condicionar el futuro de Marc Márquez, ya que de seguir así empezará a plantearse buscar otra moto con la que intentar volver a ganar.
Temas:
- Marc Márquez
- MotoGP