Un novato salva al Barcelona

El Barcelona venció al Athletic Club con un héroe inesperado. Marc Guiu, delantero de 17 años y del Juvenil A, anotó el solitario gol del encuentro para darle los tres puntos a su equipo a los 23 segundos de entrar al terreno de juego. Xavi Hernández le dio entrada a la desesperada en el 79′ y le acabó dando sus frutos nada más pisar por primera vez el césped de Montjuic.

Xavi se veía obligado a tirar de rotaciones ante el Athletic. De lo contrario, el equipo se arriesgaba a seguir llenando la enfermería de cara al Clásico del próximo sábado, en vez de vaciarla. El descanso se antojaba fundamental para llegar al partido ante el Madrid con las máximas fuerzas posibles. Sin seis titularísimos por lesión, el Barcelona salía con Iñigo Martínez dando descanso a Araujo y con Fermín López haciendo lo propio con Lamine Yamal, que esperaba su oportunidad desde el banquillo.

Mientras tanto, los vascos salían con la máxima de las mordientes arriba. Con los dos Williams, con Sancet de enganche y con Guruzeta en punta. Fueron precisamente los dos hermanos los que más peligro trajeron desde los dos costados en los primeros instantes del encuentro. De hecho, Iñaki tuvo la primera ocasión del partido en el 4′, pero el disparo desde fuera del área lo paró Ter Stegen con los ojos cerrados.

El Barcelona reaccionó rápido a las envestidas del Athletic y Joao Félix, tras una gran jugada de Ferran Torres, alias ‘El Tiburón’, mandó el primer aviso a Unai Simón enviando el balón al larguero nada más cumplirse el minuto 10. Pero los locales no se conformaron con poco. Balde, dos minutos más tarde, demostró que está recuperado al 100% y galopó por la banda izquierda para dejar a De Marcos atrás como si fuera él el juvenil y asistir a Fermín López dentro del área. El canterano remató a placer, pero Unai Simón realizó la parada del partido.

Minuto 20 y el partido entró entonces en una fase más propia de boxeo. Si antes había golpeado el Barcelona por partida doble, después fue turno de nuevo de los bilbaínos con un espectacular derechazo de Iñaki Williams. Ter Stegen volvió a salvar a su equipo con una parada soberbia.

Partido de porteros

Y tras ese intercambio de golpes, llegó la fase de adormilamiento, que perduró hasta el final del primer tiempo. Ese momento en el que el partido baja el ritmo en ocasiones, pero no en intensidad, por supuesto. Y más viniendo de un equipo como el Athletic que aprieta durante los 90 minutos. Pero en el tiempo de descuento hubo una última oportunidad para que Ter Stegen se vistiera de nuevo de santo para salvar a su equipo. Lekue firmó un jugada maradoniana en la frontal del área para asistir a Nico Williams. El pequeño de los hermanos remató a puerta pero el portero alemán volvió a privar al delantero español.

Tras el descanso, los 22 futbolistas recargaron pilas y volvieron con un gran ritmo de partido. Los hermanos Williams seguían dándole la noche a la defensa del Barcelona. No dejaban de intentarlo corriendo a la espalda, sin descanso, pero también sin éxito. En el minuto 57 se demostró que este encuentro estaba siendo de los porteros. Unai Simón también quiso ser protagonista salvando a su equipo de nuevo con una espectacular doble intervención. Primero le dijo «no» a Joao Félix y en el rechace y desde el suelo le dijo lo mismo a Fermín López. Los delanteros culés no daban crédito.

Lamine Yamal al campo

Y pasada la hora de partido, Xavi Hernández dio entrada a Lamine Yamal y Ronald Araujo con el objetivo de agitar el partido. El español entraba por Romeu y el uruguayo por Christensen. Nada más entrar, el joven delantero tuvo en sus botas la ocasión de abrir el marcador, pero envió el balón fuera de la portería de Unai Simón. 

Pasaban los minutos, pero el marcador no se movía. Con el resultado gafas, el Barcelona comenzaba a desesperarse, mientras que el Athletic comenzaba a ver con muy buenos ojos el resultado. En el 75′ lo intentaba Cancelo con un disparo durísimo abajo, pero Unai Simón volvía a frenar las intentonas culés.

Marc Guiu, al rescate

Y a la desesperada, Xavi dio entrada a Marc Guiu, delantero de 17 años del Juvenil A. En su primer balón que tocaba, a los 23 segundos de pisar el césped de Montjuic envió el balón al fondo de la red. El joven delantero se sumaba a la nueva camada de la Masía que tantas alegrías a la parroquia culé. El chaval no se creía que le estaba dando los tres puntos a su equipo nada más entrar al terreno de juego.

El Barcelona acabó entonces con Marc Guiu como ídolo del encuentro y único goleador del partido. El conjunto azulgrana sumó tres nuevos puntos para quedarse a un punto del Real Madrid. El próximo sábado se celebrará el primer Clásico de la temporada y las espadas están por todo lo alto.