Champions League: PSG 2-0 Manchester City

Messi castiga a Guardiola en su primera gran noche en París

Messi psg
Nacho Atanes
  • Nacho Atanes
  • Redactor de deportes y canterano de OKDIARIO. Desde 2016 cubriendo la información de tenis. También baloncesto, fútbol, ciclismo y otros contenidos.

Messi ya es el rey de París. El astro argentino se convirtió en el gran protagonista de la victoria del PSG (2-0) ante el Manchester City en una final anticipada a la segunda jornada de Champions League. El conjunto parisino no fue superior al cuadro dirigido por Pep Guardiola pero sí más efectivo, como demuestran los goles de Gueye y de un Messi que llevó el júbilo a las gradas del Parque de los Príncipes con un golazo, el primero con su nuevo equipo, que ya es historia.

Momento de Champions para dos de los grandes favoritos y en sus onces, pocas bromas teniendo en cuenta lo que se venía. Mauricio Pochettino, con su big three a pleno rendimiento en el plano físico, les dio las llaves del partido… siempre y cuando los jugones de Guardiola lo permitieran. Mahrez, De Bruyne, Sterling o Grealish contraponían con calidad la inigualable pegada –teórica– del PSG, todo ello sobre el papel, antes del pitido inicial en el partido de los 2.000 millones.

Lejos de un tanteo inicial antes de imponerse un estilo, el PSG golpearía primero y por mediación de un desconocido en las lides goleadoras. Idrissa Gana Gueye mandaba a la red de un trallazo un balón suelto en el área. Neymar la pedía con descaro e impaciencia pero, al ver el chut de su compañero, mediocentro de trabajo y recorrido, quedó plenamente satisfecho mientras el 1-0 se pasaba al marcador.

La disposición táctica del PSG dejaba, como posiciones iniciales, a Messi en calidad de falso nueve, cerca de un Neymar acostado a la izquierda. Mbappé, el elemento sobrante, trataría de dar profundidad desde la banda derecha, posiblemente la que peor se adecúa a sus posibilidades. A decir verdad, ninguno de los tres apareció con demasiado acierto durante los primeros 45 minutos, en gran medida porque el City se impuso y su estancia en el balcón del área rival se prolongó más que lo deseado.

Sin embargo, el conjunto de Manchester no encontró el gol en la primera mitad, aunque tuvo una de las más claras de los últimos meses. Bernardo Silva, tras un cabezazo anterior al larguero de la meta de Donnarumma, no acertaba a anotar a puerta casi vacía y a un metro escaso de la línea de gol. El City se quedaba sin tanto y pudo quedarse sin De Bruyne, quien propinó un pisotón criminal, aunque involuntario, a Gueye antes del descanso. Del Cerro Grande lo dejó en amarilla, sin que el VAR rechistara por la decisión.

Messi aparece por primera vez

La segunda mitad trajo sensaciones similares a la primera, con el City dominando y asediando a un Donnarumma que aguantaba con honores e iba haciendo méritos para un hipotético MVP, parada a De Bruyne incluida. Mientras, el PSG esperaba su momento de gloria a la contra, y este iba a llegar superado el minuto 74, con una contra que ya está en la historia del conjunto capitalino.

Messi arrancó en posición retrasada, pero ventajosa ante la escasez de defensores del Manchester City. Con camino libre, el ’30’ oteó el horizonte y vio el desmarque de Mbappé, en teoría encaminado a la ruptura pero que acabó siendo de apoyo por la genial idea del francés. Un taconazo leve, sutil, pero suficiente para dejar a su compañero solo al borde del área. El resto ya lo habíamos visto, pero no con esta camiseta. Leo anotaba y el estadio se caía. Ici c´est Messi.

Los minutos restantes se hicieron demasiado cuesta arriba para un Manchester City que no dio con la tecla para romper el entramado de un PSG que se lleva el primer duelo de los nuevos ricos de la Champions League a la espera de afrentas en instancias posteriores que pueden significar mucho más para ambos. Y lo mejor, para los franceses, es que Messi ya golea con la camiseta azul.

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