Kepa, más difícil todavía

Kepa Arrizabalaga es el portero del futuro en el fútbol español y en la cúpula del Real Madrid lo saben. El meta del Athletic acaba contrato el próximo mes de junio y el club blanco estaría dispuesto a afrontar su fichaje, pero el joven de 23 años está muy cerca de llegar a un acuerdo con el club bilbaíno para su renovación.

Kepa está cerca de dar el sí a la oferta económica del Athletic Club para cerrar su renovación. El único fleco que queda por resolver es nada menos que su cláusula, que el club rojiblanco quiere fijar en 80 millones y el meta y sus agentes prefieren que no supere los 60. En todo caso, parece que el acuerdo definitivo podría cerrarse en torno a los 65 kilos de cláusula.

Ante esta situación, en el Real Madrid están a la espera de acontecimientos, porque en la zona noble del Santiago Bernabéu tienen muy claro que Kepa tiene condiciones para ser el futuro portero del Real Madrid y podrían afrontar su fichaje aunque renovase.

De Gea sigue interesando pero su edad, 27 años, a las difíciles relaciones con el United hacen muy difícil la operación y con Keylor Navas rondando la treintena en el club se han puesto manos a la obra para intentar cerrar el fichaje del portero llamado a ser titular con la Selección española.

El Real Madrid incluso triplicaría el sueldo del futbolista si decide no renovar con el Athletic Club pero todo hacer indicar que todo se solucionará y el vasco ampliará su vínculo con el club bilbaíno en las próximas semanas. Pero esto no importa en la Castellana. En la cúpula madridista creen que sería una buena operación pagar alrededor de 65 millones de euros por un portero de 23 años y que está dispuesto a comerse el mundo. 

El portero del futuro

Kepa será uno de los mejores porteros del mundo en un futuro próximo y eso no hay quién lo discuta. En las categorías inferiores de la Selección española siempre ha estado considerado como un posible mejor meta del mundo y este año está corroborando estas teorías en el temporada de confirmación como titular en el Athletic Club. 

Tras sus cesiones a Ponferradina y Valladolid, el meta llegó para quedarse el pasado verano de 2016. En la temporada pasada disputó nada más y nada menos que 23 partidos en Liga (el resto se los perdió por lesión) y esta temporada acumula seis duelos donde se ha convertido en el jugador más importante del equipo de Ziganda.

Tras convertirse en un fijo en la sub-21, Lopetegui le ha llamado a filas para la absoluta. De su periplo con la selección nacional, nació una gran relación con la Quinta de Asensio que también puede ser clave para que el portero vasco acabe jugando en el Real Madrid en un futuro próximo.