El francés sigue rodeado de polémica

Dembélé se quedó dormido y se ausentó de un entrenamiento por su adicción a los videojuegos

En Can Barça preocupa su modo de vida y apenas tiene relación con sus compañeros

En el Barcelona preocupa la adicción de Dembélé a los videojuegos, motivo por el que llegó tarde a un entrenamiento la pasada semana

Dembélé
Dembélé, en una foto de archivo (AFP).

La actitud de Ousmane Dembélé empieza a cansar en Can Barça. El último acto de indisciplina del joven francés fue llegar hora y media tarde a un entrenamiento sin dar explicaciones, alegando después estar enfermo. En tierras catalanas empiezan a hartarse del jugador, que además apenas tiene apoyos en el vestuario y que no ha demostrado sobre el césped todo lo que se esperaba de él, pues costó la friolera de 105 millones de euros más 40 en variables.

Tal y como asegura el Diario As, el Barcelona ha tirado del hilo para intentar conocer el verdadero motivo que hizo que Dembélé se ausentara del entrenamiento la pasada semana, que no es otro que los videojuegos. Al parecer, el joven galo se reunió con varios amigos en su casa para jugar a la consola hasta altas horas de la madrugada. El problema es que el jugador del Barça se olvidó de poner el despertador, de ahí que se quedara dormido y llegara hora y media tarde a la ciudad deportiva.

En el momento dijo estar malo de la barriga, pero lo que realmente provocó ese retraso fue su adicción a los videojuegos. Dembélé, que apenas tiene relación con sus compañeros y pasa desapercibido en el vestuario, se pasa el día jugando a la videoconsola. El problema es que sus actos de indisciplina son reincidentes, de ahí que el Barcelona se plantee traspasarlo en invierno o, a lo sumo, en el mercado de verano, para intentar recuperar lo invertido.

El club no es capaz de controlar la rutina diaria del francés, que ha demostrado que no es capaz de ser responsable por sí mismo. El representante del futbolista va a intentar hacerle ver lo importante que es que cumpla los horarios y las rutinas. La preocupación del Barcelona residen en que ese desorden de Dembélé lo provoca su obsesión con los videojuegos. Un problema que está repercutiendo negativamente en su profesión, pues Valverde está dejando de confiar en él. Y el entrenador del Barça suele ser firme en este tipo de decisiones….

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