Cristiano acude al rescate de Portugal en Andorra
Partido fácil, victoria insegura. Fernando Santos tomó la decisión de dejar en el banquillo a la gran estrella de Portugal, Cristiano Ronaldo, en la visita de los lusos a Andorra, correspondiente al penúltimo partido de la fase de clasificación para el Mundial de Rusia 2018. El encuentro era ante la teórica cenicienta y por eso la bestia –aprecibida de sanción– descansó, pero sólo pudo hacerlo en la primera parte, ya que en la segunda tuvo que saltar al césped para hacer lo que mejor sabe: anotar goles que le den el triunfo a su equipo.
45 minutos de agolpamiento y frustración fueron suficientes para Cristiano Ronaldo, que veía como la vigente campeona de Europa no pasaba del empate ante una de las selecciones más débiles del ránking FIFA. Andorra se encerró y colocó un muro anti humanos que ni André Silva ni Bernardo o Gelson Martins pudieron romper.
Fernando Santos dejó de pensar en el encuentro del martes frente a Suiza, la verdadera final del grupo, para hacerlo en el presente. Portugal necesitaba a Cristiano y éste salió al rescate. En una jugada embarullada, como tantas había habido en la primera mitad, el ariete del Real Madrid apareció para poner el 0-1 en el luminoso y acabar de un plumazo con las aspiraciones de una Andorra meritoria pero –lógicamente- inoperante en ataque.
No tuvo suficiente con el tanto decisivo y Cristiano comenzó a tejer fútbol en el complicado terreno de juego andorrano. Como segundo punta en un 4-4-2, Ronaldo dejó de lado los 15 tantos de su cuenta en la fase de clasificación para hacer jugar a los demás, mediapunteando y martirizando a los rivales apareciendo por los tres carriles. El segundo gol era cuestión de tiempo y acabó por marcarlo André Silva en una jugada que comenzó en las botas de Cristiano Ronaldo, amo y señor del fútbol de Portugal.