«Si no sale nadie, no habrá fichajes»

«Si no se va nadie, no habrá fichajes». Palabra de la cúpula del Real Madrid, que contempla con tranquilidad cómo el mercado «se ha vuelto loco» este verano, reventado por los clubes ingleses, especialmente United y City, y por los 94 millones que ha pagado la Juventus por Higuaín con los 110 kilos que ha sacaco por Pogba.

Tal como adelantó DIARIO MADRIDISTA el pasado 27 de julio, la consigna de Florentino Pérez y sus directivos era muy clara: «Tenemos un plantillón y no haremos locuras por los fichajes, ni por Pogba, ni por nadie». Y no era una pose, ni una estrategia de negociación: el Real Madrid ha cumplido las instrucciones de su presidente.

Repescados Morata (Juventus), Coentrao (Mónaco) y Marco Asensio (Espanyol), tanto la cúpula del club madridista como Zidane están encantados con una plantilla que consideran «compensada y con todos los puestos doblados». De ahí el mensaje de antes de entrar, dejen salir. Y es en ese escenario en el que entran en juego Isco y James, los dos jugadores que se rifan las papeletas para salir del Real Madrid.

El malagueño quiere quedarse en la casa blanca, tal como adelantó DIARIO MADRIDISTA el 7 de agosto. Isco no se plantea salir, porque está negociando para renovar y sabe que Zidane cuenta con él. La temporada pasada fue el octavo jugador que más minutos disputó durante la etapa de Zizou en el banquillo del Real Madrid. Sólo una oferta mareante haría que el club blanco se pensase la posibilidad de traspasar a un futbolista que cuenta con el favor de técnico, crítica y público.

Un caso distinto es el de James Rodríguez. El colombiano ha vuelto de vacaciones con el propósito de enmienda de no repetir los errores de la pasada temporada y ser de nuevo el James que maravilló al mundo en su primer año de blanco. Sin embargo, en el Real Madrid están dispuestos a escuchar ofertas por el colombiano. Eso sí, siempre por encima de los 80 millones.

En la cúpula del Bernabéu, a día de hoy, no tienen ninguna prisa ni por vender a James o a Isco ni por comprar jugadores. La satisfacción con la plantilla actual es máxima y por eso se mantienen firmes: «Es muy difícil encontrar un jugador que mejore lo que tenemos ya». De todas formas, no se fíen. Ya saben lo que dice siempre Florentino Pérez: «Hasta el 31 de agosto a las 12 de la noche, todo puede pasar».