Carlos Sainz se autoimpone regresar al Dakar para despedirse como quiere

Carlos Sainz no quiere que su fin en el Dakar lo haya impuesto la FIA. El organismo le obligó este lunes a abandonar la presente edición tras la durísima etapa de 48 horas en la que sufrió un fuerte accidente junto a su copiloto Lucas Cruz. El Ford Raptor quedó muy dañado y, aunque los trabajadores del equipo a los que tanto viene ensalzando el español habrían tenido horas de sobra para ponerlo en condiciones de cara a la tercera ronda, ambos pilotos tuvieron que hacer las maletas y volverse para España.

Sainz llegará a Madrid este miércoles con un claro propósito: revisarse la espalda y poner el foco en la siguiente meta, el Dakar 2026. Pese a que desde su entorno, consultado por este periódico, afirman que todavía es pronto para asegurar que vaya a participar en la próxima edición, estando además todo en juego este año en Arabia Saudí, el cuatro veces ganador de la carrera busca prepararse física y técnicamente para que este enorme batacazo no haya sido su despedida.

Carlos Sainz, campeón del mundo de rally y leyenda del automovilismo español, merece poner punto y final a su aventura de casi 18 años en el Dakar. De correrlo en 2026, sería su número 19, una cifra totalmente histórica para un piloto que tiene el hito de haber ganado la carrera con cuatro marcas distintas (Volkswagen, Peugeot, Mini y Audi). Este, su octavo abandono, no le va a impedir seguir levantándose cada mañana para luchar por ese ansiado quinto título, aunque a día de hoy su futuro es impredecible.

Sus rutinarias revisiones que se realiza cada año marcarán gran parte de este, aunque en este Dakar Sainz ha descubierto que sí está en el equipo adecuado para ganar. Su compromiso con Ford era extremo, tanto es así que pese a perder sus opciones de llevarse el triunfo, quería permanecer en Arabia para vencer en etapas y empujar hacia la victoria a su compañero Mattias Ekström.

Ford, con opciones de victoria ya sin Carlos Sainz

En estos casi cinco días de Dakar y tras la matadora etapa 48 horas para Sainz y más pilotos españoles como Nani Roma o Laia Sainz, el Raptor se ha destapado como un rally con opciones de victoria al final de la carrera, por lo que es de esperar que el próximo año parta como uno de los favoritos, más si cabe que esta temporada, la de su entrada como equipo oficial.

Aunque ahora todo lo vea oscuro, Sainz es consciente de que tiene razones para motivarse y sobre todo tiene la certeza de que no va a ser la FIA ni ningún organismo quien dé por finalizada su enorme experiencia en el Dakar. Si se ve con fuerzas, Carlos correrá en Arabia en enero de 2026 y si no, tras este abandono tan entristecedor, podría tomarse un merecido parón.

Su decisión se cocinará, evidentemente, a fuego lento, ya que como decimos aún queda mucho por ver del Raptor en la vigente edición. El rendimiento de Ekström con el rally de Ford marcará la pauta del próximo año, un curso para el que entender los aspectos técnicos del coche y sus diferencias con los dos que están arriba (Toyota y Dacia) será decisivo. Carlos Sainz ya mira el resto de Dakar con nostalgia, pero con la certeza de que este equipo puede ser el idóneo para regresar a lo más alto en 2026.