Benzema vive su enésima tarde negra
Karim Benzema tampoco tuvo su día ante el Al Jazira. El delantero fue uno de los señalados en el mal partido del Real Madrid en la semifinales del Mundial de Clubes. Todo porque el francés volvió a fallarlo todo y no es la primera vez que esto sucede en la presente temporada. Esta vez el Bernabéu no le abucheó pero los aficionados madridistas de Abu Dabi, sí.
En su defensa cabe resaltar que su primera parte no fue desastrosa. Estuvo participativo y no marcó porque el árbitro le anuló un gol por falta de Cristiano y Ali Khaseif, el meta del Al Jazira fue un héroe durante todo el primer periodo y le sacó un buen balón después de una notable cabezazo del francés. Pero lo de la segunda parte fue de traca.
Tras el paso por los vestuarios, la peor versión del francés se volvió a ver sobre un terreno de juego. Con empate a un tanto en el marcador y con la necesidad de marcar otro gol para meterse en la final, Benzema tuvo dos ocasiones de oro pero su par de sus disparos se estrellaron en la madera. El primero no fue mala la definición pero en el seguro fue un error imperdonable para un delantero de su talla mundial.
Pero hubieron otras dos jugadas que desesperaron a la afición madridista tanto de Abu Dabi como de todo el mundo (fue Trending Topic en España). Una cuando optó por no darle el pase de la muerte a su socio Cristiano y otra cuando no llegó por pocos centímetros a un pase de la muerte de Marcelo. No era la tarde de Benzema y eso se reflejaba en su cara. Porque aunque el galo no suela mostrar sus sentimientos su cara era el reflejo del alma.
Se marchó y el Real Madrid ganó
Así que a diez minutos del final y pese a que el equipo seguía necesitando un gol como el comer, Zidane le retiró del campo para dar entrada a Gareth Bale. El colmo para Benzema fue que su sustituto marcó el tanto de la victoria en el primer balón que tocó después de que él las hubiera tenido de todos los colores.
El galo vio desde el banquillo como su equipo finalmente conseguía la victoria y todo hace indicar que volverá a ser titular en la final. Si se repiten partidos como estos y ante la vuelta de Bale, ya no es una utopía pensar que el francés puede ser suplente a corto plazo. Calidad tiene de sobra para dinamitar esta teoría y volver a enamorar.