Asensio, de jugador revelación a consagrarse de blanco

El 5 de diciembre de 2014, el Real Madrid dio un paso adelante a la hora de planificar su futuro. Fue el día en el que fichó a Marco Asensio del Mallorca por 3,9 millones de euros, valor de mercado que ya se ha multiplicado por cuatro (12), según la web especializada Transfermarkt.

Después de quedarse cedido en el club que le vio crecer el resto de esa temporada, una buena pretemporada con el conjunto blanco le valió para un nuevo préstamo, esta vez a un Primera como el Espanyol.

En la antigua Liga BBVA -ahora LaLiga Santander- debutó en la cuarta jornada, y a partir de entonces se convirtió en indiscutible en el once perico. Con varias asistencias en la primera vuelta (11 finales), su primer gol no se produjo hasta la jornada 25 para completar un total de cuatro en los 37 partidos que disputó.

Mientras tanto, en la capital de España Zidane no le quitaba ojo a la revelación de la competición doméstica, premio que se le concedió finalmente. Así, después de completar una pretemporada fantástica con la entidad madridista, el técnico francés decidió quedarse con él y no se equivocó.

Asensio, el hombre debut

El primer partido oficial de Asensio con el Real Madrid fue en la Supercopa de Europa ante el Sevilla y además como titular. Su golazo contribuyó a levantar el título, siendo uno de los destacados y estando por delante de dos pesos pesados como James e Isco en las rotaciones.

En su regreso a LaLiga, ya como jugador blanco, volvió a repetir estreno con tanto incluido frente a la Real Sociedad. El mundo entero hablaba de él y su primera convocatoria con la selección española absoluta era el premio a la constancia.

Después de su debut con el combinado nacional, el mallorquín siguió contando con minutos en el esquema de Zidane hasta los 540 totales con cuatro goles. Su debut en Champions se hizo esperar pero como en las dos competiciones anteriores con el conjunto merengue acabó con una diana suya.

Nominado al Golden Boy, premio que se asemeja al Balón de Oro pero en categoría sub’21, no será un año fácil de olvidar para un Asensio que ya ha pasado de revelación a realidad.