Araujo fue expulsado por roja directa tras una falta a Barcola siendo el último jugador

La eliminatoria entre el Barcelona y el PSG dio un vuelco en el minuto 30 de la primera parte, después de que Ronald Araujo se fuera expulsado por roja directa, tras una falta a Barcola. El central era el último hombre y derribó en la frontal del área cuando el delantero iba sin más oposición en busca de Ter Stegen. Una acción que llegó cuando aún quedaba una hora de partido por delante y que pudo marcar el desenlace de una eliminatoria comandada sin discusión hasta entonces por los de Xavi Hernández. Por si fuera poco, Cancelo cometió un penalti claro sobre Dembélé y permitió al equipo francés darle la vuelta de forma definitiva a la eliminatoria.

Corría la media hora de juego en Montjuic cuando Barcola le ganó la espalda al uruguayo y se marchaba hacia la portería de Ter Stegen. Araujo le sujetó por el hombro, cuando iba a entrar en el área, y le derribó. El colegiado rumano Istvan Kovacs no lo dudó y le mostró la roja directa, ya que no había opción de que Cubarsí llegase al cruce.

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El central era el último hombre y, al tratarse de una ocasión clara y manifiesta de gol, vio la roja directa. No se lo podía creer Xavi, ni tampoco el propio futbolista, que protestó durante varios segundos la decisión que el colegiado acababa de tomar. La acción apenas precisó de revisión del VAR, puesto que era clara. La única duda residía en si el agarrón se podía haber prolongado hasta que el delantero del PSG entraba en el área y, por tanto, si era penalti.

Araujo se jugó el penalti con Barcola

La acción no dejó ningún lugar a dudas, puesto que Araujo era el último hombre y Barcola estaba solo ante Ter Stegen. Tampoco tenía tiempo a llegar al balón Cubarsí, más centrado pero por detrás de ambos jugadores. Sin embargo, los futbolistas del Barcelona no entendieron la decisión tomada por Kovacs. Tampoco un Xavi que protestó mucho la expulsión, incluso al término de la primera mitad.

Hasta ese momento, el partido estaba claramente dominado por el Barcelona. Los culés habían conseguido aguantar a un PSG que había salido con todo en busca de adelantarse en el marcador y poder empatar la eliminatoria. Sin embargo, a las primeras de cambio, se adelantaban por medio de Raphinha, que volvía a ser el salvador del equipo como ya sucediera en el Parque de los Príncipes. El brasileño hacía un gol aprovechando la mala defensa de los de Luis Enrique y una buena acción de Lamine Yamal.

Pero la acción a la media hora cambió todo. Xavi metió a Iñigo Martínez, sacrificando a un Yamal que estaba marcando diferencias. Por su parte, los parisinos aprovecharon y se fueron arriba a por todas, sabiendo que de lograr un gol, volverían a estar en disposición de tener opciones de clasificarse para semifinales.

Minutos después, el propio Barcola aparecería por la derecha para poner un centro raso al que milagrosamente no llegó Mbappé, al que le pudo hacer penalti Iñigo Martínez, pero al que sí que llegó Ousmane Dembélé. El ex azulgrana aparecía –como en la ida– para rescatar a los suyos y poner de nuevo la eliminatoria patas arriba.

Claro penalti de Cancelo a Dembélé

En el minuto 60, el colegiado señalaba un claro penalti cometido por Joao Cancelo, que se lanzó a por el balón que tenía Dembélé y llegó tarde, derribándole por detrás. El atacante, en la que fue su gran noche de regreso a la Ciudad Condal, protegió bien el balón y provocó que el lateral se lo llevara por delante de forma clara. No perdonaría Mbappé desde los 11 metros.