Abner, de suplente de Marcelo a superar otro calvario
Abner Felipe Souza de Almeida comienza a volver a ver algo de luz al final del túnel. Quizás a muchos no les suene familiar su nombre, y es que no podido demostrar en el Real Madrid las cualidades por las que llegó al club merengue.
En el verano de 2014, el joven lateral izquierdo brasileño de 18 años recalaba en el equipo blanco procedente del Coritiba para reforzar al Castilla.
Abner ha sufrido tres lesiones graves de rodilla a sus 19 años
Abner llegaba al Real Madrid como una de las grandes promesas del fútbol brasileño pese a que esa misma temporada ya se había roto el ligamento cruzado de la rodilla izquierda, una lesión que frustró su llegada a la Roma y a la postre le sirvió para firmar por el club de Concha Espina.
De él se llegó a decir que era el nuevo Roberto Carlos por su explosividad, su velocidad y su capacidad para desdoblarse y ser importante en labores ofensivas.
El carioca llegó a la capital tocado y terminó de recuperarse en Valdebebas. Pero la mala suerte volvió a cebarse con el lateral izquierdo, que volvió a romperse el ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda en septiembre de 2014.
Abner fue operado y se perdió toda la temporada, pero en el Real Madrid seguían creyendo en sus posibilidades y le mostraron todo el apoyo durante su recuperación.
Un año después, otra desgracia
Cuando parecía que su recuperación era un hecho, tanto que Benítez le llegó a considerar como el suplente de Marcelo para esta temporada, la rodilla izquierda de Abner volvió a romperse. En septiembre de 2015, justo un año después de la anterior lesión, la plastia del ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda se rompió.
Era un fijo en los entrenamientos para Benítez y el club tenía confianza en su vuelta y en su gran progresión, e incluso le llamaron para ir a la gira por Australia y China, pero esta nueva rotura volvió a fastidiar su prometedora carrera.
Pese a las tres graves lesiones que ha sufrido a sus 19 años, Abner sigue siendo optimista y trabaja duro día a día en Valdebebas para volver a sentirse futbolista. Habrá que ver si su rodilla izquierda le permite llegar a ser ese gran lateral que parecía que podía ser. Por esfuerzo no va a ser.