Qué es el síndrome del restaurante chino, según los expertos: «es una injusticia que dura 56 años»
Este es el síndrome del restaurante chino que debes empezar a eliminar
Guía práctica de restaurantes chinos en Usera: dónde comer auténtica comida china para celebrar el año del Dragón
Adiós al mito más repetido sobre la cerveza: lo que pasará si la comparas con el vino
Éste es el origen real del apellido Moreno: los expertos lo desvelan
Hay un síndrome llamado del restaurante chino que según los expertos es una injusticia que dura 56 años. Una opción de lo más recomendable que quizás hasta ahora nunca hubieras pensado que sucedería en un restaurante que ha acabado siendo uno de los básicos. Ir al chino cuando queremos comer rápidamente un poco de arroz o unos fideos que sabemos que gustarán a toda la familia o un delicioso rollito de primavera que nos ayude a descubrir este tipo de detalles que son los que marcarán la diferencia.
Los expertos afirman que estamos consiguiendo una serie de novedades importantes que debemos empezar a analizar, especialmente cuando estamos ante un restaurante chino que quizás nos deje con la boca abierta. Hay un elemento que forma parte de su día a día y que ha despertado todo tipo de sospechas, quizás siendo uno de los que se ha convertido en una realidad que nos ha afectado en estos días que tenemos por delante. Habrá llegado ese momento en el que tenemos que afrontar ese restaurante chino o visita a este lugar, de forma excepcional. La injusticia que dura 56 años es una realidad.
Así nació el síndrome del restaurante chino
Hace 56 años, en el año 1968 se acuñó este término, el famoso síndrome del restaurante chino nacía después de que se descubrieran una serie de síntomas que procedían de una persona que había comido en este lugar. Las consecuencias fueron una crítica feroz, después de comparar el consumo de alcohol con una escapada a un restaurante chino.
Han pasado muchos años y eso nos ha dejado una serie de novedades importantes que nos han acompañado durante estos años. Sin duda alguna, habrá llegado el momento de empezar a pensar en todo lo que tenemos por delante y en las consecuencias que nos estarán esperando.
Estos profesionales de la restauración chinos se han enfrentado a un estigma que viene determinado por un ingrediente que usan en su cocina. En aquellos tiempos era un elemento que no se conocía, pero hoy en día, es un básico que debemos empezar a conocer y se ha demostrado seguro.
Por lo que, estos mencionados efectos secundarios, pueden ser consecuencias de una forma de ver a estas personas con tintes racistas que no debemos dejar escapar. Siendo un detalle que nada tiene que ver con la realidad.
Es una injusticia que dura 56 años
La realidad es que este ingrediente que sirve para potenciar el sabor, de la misma forma que lo hacen otros ingredientes como la sal, no es tan malo como parece. Podremos empezar a prepararnos para acabar con esta injusticia si nos fijamos en las novedades sobre el glutamato que nacen de la FDA.
Siguiendo con la explicación de este producto: «El glutamato monosódico (MSG) es la sal sódica del aminoácido glutámico común. El ácido glutámico está presente de forma natural en nuestros cuerpos, y en muchos alimentos y aditivos alimentarios».
Saber un poco más cómo se hace este elemento nos ayudará a conocerlo más: «El glutamato mosódico se encuentra de forma natural en muchos alimentos, como los tomates y los quesos. La gente de todo el mundo ha comido alimentos ricos en glutamato a lo largo de la historia. Por ejemplo, un plato histórico en la comunidad asiática es un caldo de algas rica en glutamato. En 1908, un profesor japonés llamado Kikunae Ikeda pudo extraer el glutamato de este caldo y determinó que el glutamato proporcionaba el sabor sabroso a la sopa. El profesor Ikeda presentó entonces una patente para producir GMS y la producción comercial comenzó al año siguiente. Hoy en día, en lugar de extraer y cristalizar el glutamosódico del caldo de algas marinas, el glutamentos se produce mediante la fermentación de almidón, remolacha azucarera, caña de azúcar o melaza. Este proceso de fermentación es similar al utilizado para hacer yogur, vinagre y vino».
En América, pero también en Europa se obliga a hacer saber al consumidor si un alimento está cocinado con este añadido: «La FDA requiere que los alimentos que contengan glutamato de sodio agregado lo enumeren en el panel de ingredientes del envase como glutamato monosódico. Sin embargo, el GM se produce naturalmente en ingredientes como la proteína vegetal hidrolizada, la levadura autolizada, la levadura hidrolizada, el extracto de levadura, los extractos de soja y el aislado de proteína, así como en tomates y quesos. Si bien la FDA requiere que estos productos se enumeren en el panel de ingredientes, la agencia no requiere que la etiqueta también especifique que contienen glutamato natural. Sin embargo, los alimentos con cualquier ingrediente que contenga glutamato natural no pueden reclamar «sin glutamatosódico» o «sin glutamato msatano añadido» en su empaque. El glutamato mosódico tampoco se puede incluir como «especias y saborizantes».
Temas:
- Alimentos
- Restaurantes