El objeto que tenemos todos en casa con el que puedes ahorrar más de 1.300 euros al año: así es cómo hay que usarlo


Ahorrar dinero puede parecer una tarea complicada para muchas personas, especialmente en tiempos donde la inflación y los gastos cotidianos parecen no dar tregua. Con el aumento constante en los precios de la vivienda, la energía, la alimentación y otros gastos básicos, llegar a fin de mes con un poco de dinero guardado es un verdadero desafío para muchos hogares. Sin embargo, existen formas prácticas y fáciles de implementar que pueden ayudar a construir un fondo de ahorro de manera gradual y sin que suponga un esfuerzo enorme.
Recientemente, un conocido analista financiero español, Eduardo Boliches, ha compartido un método sencillo y efectivo que cualquiera puede seguir para ahorrar más de 1.300 euros en un solo año. Lo mejor es que esta técnica no requiere conocimientos complejos ni grandes sacrificios, y se basa en aprovechar algo tan común como un calendario anual. Si te has preguntado cómo dar los primeros pasos para crear un hábito de ahorro constante, este consejo puede ser justo lo que necesitas.
El método del calendario
Eduardo Boliches, fundador y director de la Escuela de Trading y Forex, recomienda usar el calendario de semanas del año para determinar cuánto dinero destinar a la hucha o a una cuenta de ahorro cada semana. La clave está en fijarse en el número que aparece junto a cada lunes del calendario, que indica la semana correspondiente, desde la 1 hasta la 52. De este modo, la primera semana del año se deposita un euro, la segunda dos euros, y así sucesivamente, aumentando la cantidad conforme avanza el año.
Este sistema no sólo es fácil de recordar, sino que también genera una progresión gradual que resulta menos difícil de cumplir que ahorrar una cantidad fija grande desde el principio. En total, aplicando este método durante un año, se logra juntar un total de 1.378 euros. Y lo más interesante: al repetirlo año tras año, la cantidad ahorrada se multiplica. Por ejemplo, en una década podrías acumular casi 14.000 euros sin apenas darte cuenta.
Una estrategia inteligente
Una de las principales barreras para ahorrar dinero es la falta de constancia. Muchas personas intentan guardar una suma fija cada mes, pero se frustran si alguna semana o quincena surge un gasto imprevisto. Ahorrar poco a poco, y hacerlo semanalmente, facilita crear un hábito sólido y manejable. Además, este método del calendario tiene la ventaja de que la cantidad inicial es baja, permitiendo empezar con un euro.
Conforme las semanas avanzan, aumenta la cantidad que se debe guardar, pero para ese momento el hábito ya está arraigado y la mayoría de las personas ya se ha acostumbrado a apartar ese dinero. Es un proceso gradual que refuerza la constancia y hace más viable mantener el ahorro durante todo el año.
Un hábito que se adapta a cualquier bolsillo
Lo más atractivo de este sistema es que se adapta a casi cualquier presupuesto. Al comenzar con cantidades pequeñas, casi cualquier persona puede sumarse al reto. Además, este método permite flexibilidad: si una semana el ahorro debe ser menor o incluso nulo, se puede compensar en semanas posteriores, siempre y cuando se mantenga el compromiso general. La idea es crear un fondo progresivo sin sentir que el ahorro es una carga.
Consejos adicionales
Aunque el método del calendario es una base sólida para comenzar a ahorrar, existen algunas recomendaciones que pueden ayudarte a sacar el máximo provecho de esta práctica y hacer que tus ahorros crezcan aún más.
Primero, es fundamental elegir un lugar seguro donde guardar el dinero que vas acumulando. Guardarlo en una hucha física puede ser efectivo a corto plazo, pero para protegerlo y, si es posible, obtener algún rendimiento, lo ideal es depositarlo en una cuenta de ahorro o un depósito a plazo fijo que ofrezca intereses. Así, tu dinero no sólo estará seguro, sino que también trabajará para ti.
Además, no olvides aprovechar cualquier ingreso extra que recibas a lo largo del año. Puede tratarse de una devolución de impuestos, un bono laboral o incluso alguna recompensa inesperada. Destinar una parte de esos ingresos adicionales a tu fondo de ahorro puede acelerar tu progreso y brindarte una mayor tranquilidad financiera.
Otro punto clave es mantener el dinero ahorrado exclusivamente para emergencias o proyectos importantes. Evita utilizar este fondo para gastos cotidianos o caprichos, ya que romper el hábito puede dificultar volver a empezar. Un ahorro reservado y protegido es una herramienta poderosa para enfrentar imprevistos sin necesidad de recurrir a préstamos o endeudarte.
Por último, combinar esta técnica con una revisión constante de los gastos puede marcar la diferencia. Detectar y eliminar gastos innecesarios hará que apartar dinero semanalmente sea más sencillo y menos estresante. Además, revisa tu progreso periódicamente; esto te motivará a continuar y te permitirá ajustar la cantidad que ahorras si ves que puedes aumentar el ritmo sin problemas.