La verdadera historia de la oreja de Van Gogh y otras curiosidades del pintor
La autolesión de Van Gogh fue un arrebato a causa de una crisis existencial
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La historia del pintor postimpresionista holandés Vincent Van Gogh es quizás una de las más apasionantes y sorprendentes en el mundo del arte. Este genial artista pasó a la historia por obras muy celebres como Los Girasoles, pero también por llevar una vida bastante atormentada que incluso le llevó a cometer una automutilación. Conozcamos ahora más sobre la verdadera historia de la oreja de Van Gogh y otras curiosidades del pintor.
La verdadera historia de la oreja de Van Gogh y otras curiosidades del pintor
Fue la noche del 23 de diciembre de 1888, en Arles, cuando Vincent Van Gogh se cortó la oreja con una navaja, la envolvió en una hoja de periódico y se la entregó a una mujer, de la que se decía que era una prostituta. ¿Fue un gesto de ira, de desesperación (¿para qué?), ¿El resultado de una pelea con su amigo pintor Paul Gauguin? A lo largo de los años, las teorías han sido las más dispares.
Sin embargo, siempre se pensó que la mutilación era pequeña y que solo afectaba a una pequeña parte del lóbulo izquierdo. Pero un documento que fue hallado en 2016, reveló que en realidad se trató de una lesión mucho más grave: el pintor se había cortado casi todo el pabellón izquierdo. Un acto violento de autolesión que precedió al suicidio, ocurrido dos años después.
El boceto que explica cómo se autolesionó Van Gogh
El documento en sí es un boceto dibujado en 1930 por Félix Rey, el médico que trató la herida de Van Gogh en el hospital de Arles. Un dibujo que fue hallado entre los papeles de los archivos del escritor Irving Stone, quien escribió la famosa biografía de Van Gogh «Lust to Live» .
Para conocer la vida del pintor, Stone fue a Arles en 1930, y también visitó al médico que lo atendió, pidiéndole que explicara cómo se había cortado la oreja Van Gogh.
En el boceto, fechado el 18 de agosto de 1930, se ve claramente que el corte corresponde a gran parte del pabellón. El dibujo se exhibió en la exposición en el museo Van Gogh de Amsterdam, On The Verge of Insanity, dedicada a la locura del artista.
La mujer misteriosa
El boceto reveló la gravedad de la lesión de Van Gogh, pero no además también se ha sabido hace poco quien era la mujer a quien el pintor le dio su oreja.
Fue una entusiasta de Van Gogh, Bernadette Murphy, quien dedicó un libro a la historia del oído del pintor y pudo averiguar quien fue la «misteriosa mujer». En su libro explica que la mujer a la que supuestamente Van Gogh le trajo la oreja en medio de la noche no era una prostituta llamada Rachel, como siempre se ha dicho, sino una sirvienta de 19 años que se llamaba Gabrielle.
¿Por qué se cortó la oreja?
En cuanto al motivo real por el que Van Gogh decidió cortarse su oreja izquierda, siempre se dijo que fue un arrebato tras una discusión con su amigo el también pintor Gaugin, pero varios historiadores tienen la versión de que en el momento en el que se produjo el incidente, Van Gogh vivía una crisis existencial y además parece que estaba bajo los efectos de la absenta que había bebido en exceso. Todo ello desencadenó que acabara cogiendo una cuchilla de afeitar con la que se autolesionó.
Otras curiosidades de Van Gogh
Junto a la historia en torno a la oreja de Van Gogh, otras muchas son las curiosidades que podemos revelar sobre el famoso pintor del que ya todos saben que a pesar de su celebridad hoy en día, murió en la pobreza.
El genial artista se acabó quitando la vida el 29 de julio de 1890 en una casa de la Provenza, en Auvers-sur-Oise , donde se había mudado durante algún tiempo y tras por lo visto, pegarse un tiro en el estómago.
Una vida llena de arte pero también de dolor y sufrimiento aunque Van Gogh siempre había intentado buscar la felicidad. El pintor siempre vivió con el recuerdo de un hermano que murió al nacer con quien compartió el nombre. Creció viendo ese nombre, el suyo, en una tumba y siempre tratando de llenar la oscuridad que creó para él. Por todo ello se tiene la creencia que el amarillo cromo es el color que le daba alegría y le apartaba de todos sus malos pensamientos, de ahí que fuera el color que más utilizaba para pintar. Un color que para él era un medio para salir de las sombras, un símbolo de alegría . Se convirtió casi en una obsesión, tanto es así que se dice que Van Gogh ingirió el color del tubo en un intento por absorber la mayor cantidad posible de sus efectos y adquirir esa felicidad que tanto atraía a sus ojos. Evidentemente, en su momento, los colores se elaboraban con materiales minerales, azafrán y clara de huevo. Además, el amarillo era el menos caro de los colores, un detalle nada despreciable para Vincent que pasó penurias económicas toda su vida.