Un hombre impregnado de gasolina amenaza con prenderse fuego a él mismo y a los policías en Alcoy

Un varón ha sido detenido por agentes de la Policía Nacional en Alcoy y posteriormente ingresado en el hospital Virgen de los Lirios de la localidad para ser valorado por el servicio de psiquiatría después de ser reducido por los propios agentes. El varón se hallaba en una zona de frondosa vegetación, impregnado de gasolina por todo su cuerpo y sostenía un bidón, también con más gasolina en una mano, mientras en la otra portaba un mechero con el que hacía el gesto de utilizarlo para prenderse fuego, según ha informado la Policía Nacional. Tras ser detenido, el citado varón ha manifestado a los agentes que su intención era: «Prenderse fuego él para quemar todo el monte y a los policías», según las mismas fuentes. 

El suceso arranca a altas horas de la madrugada del 26 de julio cuando, según el relato policial, agentes adscritos al Grupo de Atención al Ciudadano de la Comisaría de la Policía Nacional en Alcoy recibieron el aviso de una mujer, que manifestaba su preocupación porque su marido, que llevaba días sin tomar la medicación para una enfermedad mental, se había marchado de la vivienda con un bidón de gasolina, un mechero, un hacha y un cuchillo.

Se había desplazado hasta un paraje llamado Fuente de la Salud, también en Alcoy, con su vehículo. El coche fue hallado sin nadie en su interior, pero sí había una nota en el parabrisas, en la que se podía leer: «Estoy en la Fuente de la Salud, ahí os espero perros cobardes».

Los agentes de la Policía Nacional y una dotación de la Policía Local de Alcoy se trasladaron de inmediato a la zona dónde presuntamente se hallaba la persona a la que buscaban. Una vez allí, comenzaron a llamarle por su nombre. Y el varón buscado les respondió, según la Policía Nacional: «Aquí estoy, perros. No vais a quedar ninguno vivo».

El mencionado varón se encontraba en una zona con frondosa vegetación. Y estaba, como se ha dicho, impregnado de gasolina por todo el cuerpo. En una mano, sostenía un bidón de gasolina. Y, en la otra, un mechero, que hacía ademanes de utilizar en cualquier momento.

Mientras uno de los agentes le distraía, otro se acercó corriendo y lo derribó antes de que pudiera prenderse fuego con el mechero, para proceder, acto seguido a su detención.

En las proximidades al lugar de la detención, los agentes hallaron un cuchillo de grandes dimensiones y un hacha. Según la Policía, listos para ser utilizados en cualquier momento.