Todo lo que necesitas saber sobre la gala de los Premios Goya 2020

La gala de los Goya siempre ha tenido un gran enemigo natural: su larga duración y su poca identidad para convertirse en un espectáculo televisivo ameno y entretenido para aquellos que no están sumergidos en el mundo del cine. Este pequeño escollo dificulta, por no decir impide, que el gran público se acerque a esta celebración que, en muchas ocasiones, ha llegado a convertirse en un producto endogámico hecho por y para la industria española. La gala de este 2020 también será larga: rondará las cuatro horas de duración como en años anteriores.

El matrimonio cómico Silvia Abril y Andreu Buenafuente vuelven a ponerse en primera línea de tiro como maestros de ceremonias, además de escribir el guión de la gala y producirla a través de su productora El Terrat. El año pasado su fórmula funcionó y este año buscan repetir el éxito. Exceptuando algún momento que sacó los colores de la vergüenza a más de uno, las intervenciones amenizadoras fueron divertidas y escasas.

Este año la Academia se enfrenta a un reto derivado de la novedosa localización: transformar el Palacio de los Deportes Martín Carpero de Málaga, un espacio gigante enfocado a eventos deportivos, en un lugar algo más reducido y con apariencia de teatro convencional.

Cabe esperar, con la investidura de Pedro Sánchez y el nuevo Gobierno junto a Pablo Iglesias, que las reivindicaciones políticas de este año se reduzcan a su menor exponente dada la connivencia que acostumbra a tener el sector del cine español con los Gobiernos de izquierdas. A la gala, por ahora, han confirmado su asistencia el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; el Ministro de Cultura, José Manuel Rodríguez Uribes; el Ministro de Consumo, Alberto Garzón; el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno; y la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, entre otros.

Rosalía no estará pero Amaia sí

El año pasado, la actuación de Rosalía en los Goya rompió todos los esquemas convirtiéndose en lo más visto de la noche. Con ese hito difícil de superar, la Academia trata de, al menos, ofrecer alguna actuación a la altura. Mariano Barroso, director de la Academia, ha confirmado la actuación de ‘A Chorus Line’, un extracto del musical que interpreta y produce el mismísimo Antonio Banderas en su recién inaugurado Teatro del Soho en Málaga. El actor aprovecha su tirón para hacer promoción de uno de sus proyectos más ambiciosos.

Junto a la actuación de la compañía de ‘A Chorus Line’, también actuará la cantante de Estepona, Ana Mena; el pianista y cantante británico Jamie Cullum y la que será la actuación más emocionante de la noche: la de Celia Flores -hija de Pepa Flores- y Amaia, que homenajearán a la irrepetible artista malagueña cantando varias de sus canciones.

La ausencia de Marisol

Aunque este año hay algún que otro Goya que, prácticamente, está ya decidido, quién seguro se va a llevar un cabezón a su casa es Pepa Flores. La actriz conocida popularmente como Marisol y que se convirtió en la imagen de aquella canción archiconocida (y si no, eres demasiado millenial) de ‘La vida es una tómbola’.

Josefa Flores saltó a la fama en los años 60 cuando tenía tan solo 12 años de edad. Su rostro angelical y su prodigiosa voz para cantar flamenco como nadie, la convirtieron en la niña prodigio del franquismo. Ella ya ha declarado que no hará acto de presencia en la gala. Mantiene su retiro de la vida mediática que inició en 1986. Sí estará presente su hija, la cantante Celia Flores, que además de recoger el galardón en nombre de su madre actuará en la ceremonia junto a la triunfita Amaia.

Una infancia y adolescencia extenuantes en las que confesó abusos sexuales y explotación, en las que filmó películas tan míticas como ‘Tómbola’ (Luis Lucía, 1962), ‘Marisol rumbo a Río’ (Fernando Palacios, 1963) o ‘Búsqueme a esa chica’ (Fernando Palacios, 1964). Cuando se desvinculó de Marisol, Pepa Flores haría uno de los papeles más importantes de su carrera en ‘Los días del pasado’, dirigida por Mario Camus en 1978. El Goya de Honor es más que merecido aparezca o no aparezca en persona.