La NASA acaba de descubrir lo que Dinamarca lleva años intentando ocultar: se confirman las teorías
Camp Century fue una base militar secreta de la Guerra Fría
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En la década de los 40, en plena Guerra Fría, Estados Unidos intentó comprar Groenlandia, la isla más grande del mundo, por 100 millones de dólares. Aunque Dinamarca rechazó la oferta, permitió que Estados Unidos estableciera bases militares en el territorio, conscientes de su valor estratégico en la lucha contra la Unión Soviética. Entre los proyectos más destacados estuvieron la base aérea de Thule y la misteriosa «Ciudad bajo el Hielo» o Camp Century, construida en 1959 para albergar misiles nucleares en un sistema de túneles subterráneos. Sin embargo, debido a la inestabilidad del hielo, el proyecto fue abandonado en 1967, quedando oculto bajo capas de hielo y nieve.
Recientemente, la NASA ha descbierto nuevas estructuras de Camp Century, desvelando secretos ocultos. Además, se reveló que durante la década de 1960, Estados Unidos violó acuerdos con Dinamarca al transportar armas nucleares a la isla, lo que dio lugar al escándalo conocido como «Thule-Gate». El interés por Groenlandia resurgió con la reelección de Donald Trump, quien, más allá de su valor geoestratégico, veía en la isla una fuente crucial de minerales raros como y cobalto, esenciales para la tecnología moderna. Aunque en 2019 Dinamarca rechazó su compra, Estados Unidos sigue buscando maneras de explotar los recursos minerales de la isla, un paso en su rivalidad con China en la carrera por el dominio comercial de materiales tecnológicos.
La ciudad ‘secreta’ de Groenlandia
El descubrimiento reciente de una «ciudad bajo el hielo» en Groenlandia ha desvelado los restos de Camp Century, una base militar secreta de la Guerra Fría que estuvo oculta durante más de 50 años. Este hallazgo fue posible gracias a un radar de última generación llamado UAVSAR, utilizado por científicos de la NASA. Durante un vuelo sobre la capa de hielo de Groenlandia, los investigadores identificaron lo que inicialmente parecía una anomalía, que resultó ser la base subglacial de Estados Unidos.
Camp Century
Camp Century fue construida en 1959 como parte del Proyecto Iceworm, una iniciativa secreta del ejército estadounidense diseñada para crear una red de lanzamientos de misiles nucleares bajo el hielo de Groenlandia.
La base contaba con túneles subterráneos, laboratorios y un reactor nuclear que abastecía de energía a la instalación. Sin embargo, debido a problemas técnicos y organizativos, el proyecto se abandonó en 1967, dejando la base sepultada bajo capas de nieve y hielo.
El interés por Camp Century surgió al realizar un estudio sobre la capa de hielo de Groenlandia con el objetivo de entender cómo estas formaciones podrían reaccionar al calentamiento global y al aumento de las temperaturas. Los científicos estaban buscando el lecho del hielo cuando detectaron las estructuras enterradas. Utilizando el radar UAVSAR, lograron crear mapas tridimensionales detallados de la base, lo que permitió visualizar las instalaciones de manera más clara que nunca antes.
Aunque el descubrimiento de Camp Century es de gran interés científico, también plantea preocupaciones medioambientales. La base dejó atrás residuos peligrosos, como combustible diésel, aguas residuales no tratadas y PCB (bifenilos policlorados), compuestos que pueden ser tóxicos para el medio ambiente. Con el deshielo acelerado de la región, existe el riesgo de que estos desechos sean liberados en el futuro, lo que podría tener implicaciones tanto a nivel local como global.
El estudio de Camp Century también ofrece valiosa información sobre cómo las capas de hielo de Groenlandia responden al cambio climático. Si bien la base no saldrá a la superficie en el corto plazo, el continuo deshielo podría exponerla, liberando los residuos que quedaron atrapados bajo el hielo. Este hallazgo también permite a los científicos modelar el ritmo del deshielo y predecir el futuro aumento del nivel del mar, una preocupación central en la investigación sobre el cambio climático.
Además de su valor medioambiental, el redescubrimiento de Camp Century ofrece una visión única de los retos técnicos y las ambiciones militares de la Guerra Fría. La base fue parte de una estrategia de defensa secreta de Estados Unidos, diseñada para operar en caso de un ataque nuclear. Aunque el Proyecto Iceworm no tuvo éxito, el legado de Camp Century sigue siendo relevante hoy en día, tanto desde un punto de vista histórico como científico.
En resumen, el descubrimiento de Camp Century ha revelado una parte oculta de la historia militar, y también ha aportado datos cruciales para entender los impactos del cambio climático en las regiones polares. La NASA sigue investigando la capa de hielo en Groenlandia y otras regiones polares, con el objetivo de monitorear cómo el deshielo afecta tanto al medio ambiente como a las infraestructuras subglaciares abandonadas.
Este hallazgo subraya la importancia de la tecnología avanzada, como los radares de última generación y las herramientas de mapeo tridimensional, para explorar y comprender los misterios ocultos bajo la superficie de nuestro planeta. Además, proporciona información vital sobre cómo el cambio climático podría afectar al futuro de la Tierra, permitiendo predecir y analizar posibles impactos ambientales a largo plazo.