Socialistas, separatistas y ‘comunes’ montan un cordón sanitario contra Vox en Barcelona
El concejal de Vox en el Ayuntamiento Gonzalo de Oro califica de "porquería" esta iniciativa
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El Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado un «cordón democrático» contra Vox tras obtener representación, con dos concejales, en el Consistorio de la Ciudad Condal en las elecciones municipales del 28M. La proposición ha sido presentada por Barcelona en Comú, la marca electoral liderada por al ex alcaldesa Ada Colau, y ha sido aprobada en la Comisión de Presidencia, Seguridad y Régimen Interior del Ayuntamiento barcelonés.
La iniciativa ha sido aprobada por los votos a favor de Barcelona en Comú, ERC, Junts y el PSC. El actual alcalde de Barcelona es el socialista Jaume Collboni. PP y Vox han votado en contra. En concreto, la proposición pide establecer un «cordón democrático en contra de formaciones de extrema derecha» e insta a las formaciones a «llegar a un consenso que, más allá de colores políticos, dé prioridad a los valores democráticos, como se hizo en el Parlament» de Cataluña.
El texto ha sido presentado por Jess González, concejal de la formación de Colau, y pode la creación de un grupo de trabajo que redacte «un pacto para un ayuntamiento comprometido con la democracia, los derechos y la diversidad ante la amenaza que implica la entrada de la extrema derecha en las instituciones».
Los grupos que han apoya esta iniciativa quieren que este pacto sea presentado en el Pleno de octubre con el fin de «mostrar el compromiso con una ciudad y un país plenamente democráticos» y de apoyar «al tejido asociativo y vecinal incluyendo en los espacios de seguimiento de este pacto a la sociedad civil».
«Porquería»
Vox ha calificado de «porquería» esta propuesta. «Discurso de oro es esta porquería de propuesta que han hecho. Es una vergüenza que una institución democrática se propugne hacer un cordón antidemocrático, a nosotros y a cualquiera», ha afirmado el concejal y líder de la formación de Santiago Abascal en el Ayuntamiento de Barcelona, Gonzalo de Oro. «Sólo pretenden señalarnos y ponernos en la diana para que venga luego un hiperventilado y nos agreda», ha añadido.
El presidente del Grupo Municipal del PP en el Consistorio, Daniel Sirera, considera que esta iniciativa es «profundamente ofensiva para los barceloneses que decidieron votar a Vox». También ha acusado a los comunes de «instalar cordones sanitarios».
«No será suficiente»
La teniente de alcalde del Consistorio barcelonés, la socialista Maria Eugènia Gay, se ha limitado a defender «el impulso» de este pacto para «defender los derechos humanos».
«La irrupción de la extrema derecha y su discurso en el Consistorio merece una reflexión profunda», ha indicado la concejal de Junts Victòria Alsina.
Por su parte, Elisenda Alamany ha sostenido que está «de acuerdo con los grupos de trabajo», pero que «no será suficiente». «Y la coherencia se debe aguantar siempre: cuando nos va a la contra y cuando nos permite llegar a la Alcaldía también», ha apostillado en alusión al que que líder de BCN pel Canvi en el anterior mandato, el ex primer ministro francés Manuel Valls.