Trastornos del sueño en niños, ¿cómo detectarlos?

Uno de los aspectos que más preocupa a los padres de niños pequeños es que estos descansen correctamente. Y es que es la clave para que gocen, en general, de un buen estado de salud. Y es que dormir de la manera adecuada otorga energía, evita dolores de cabeza, acaba con la irritabilidad, permite conseguir una vida normal y un estupendo rendimiento escolar…

Por ese motivo, es importante que si tienen dudas de que sus hijos cuentan con un trastorno del sueño, tomen las medidas oportunas. Así, en primer lugar, lo que deberán hacer es ver si cuentan con los síntomas que pueden indicar que sí lo poseen.

De día

Según la “Guía Práctica Clínica sobre Trastornos del Sueño en la Infancia y Adolescencia en Atención Primaria”, publicada por el Ministerio de Sanidad de España, es importante que los padres analicen cómo se comportan sus hijos durante el día. En concreto, es necesario que valoren si cuentan con determinados síntomas que pueden indicar que sufren un problema con el descanso:

• No tienen un buen rendimiento en el colegio.

• Su comportamiento tiene alteraciones e incluso, en ocasiones, se define por ser violento.

• Es habitual que presente dolores de cabeza por las mañanas.

• Los días que descansan más están de mejor humor e incluso se comporta de manera mucho más correcta.

• Presentan una clara hiperactividad.

• Sufren aún tipo de dolores por culpa del crecimiento.

• De forma frecuente, son víctimas de ciertos accidentes.

• Presentan un retraso en lo que se refiere a la altura con respecto a la edad que ya cuentan.

• Durante la mañana cuentan con una somnolencia clara y manifiesta.

De noche

De la misma manera, para poder detectar trastornos del sueño, la mencionada publicación del Ministerio de Sanidad establece que también hay que observar al pequeño por la noche. En concreto, habrá que acudir al médico se presentan síntomas tales como estos:

• Le cuesta mucho conciliar el sueño, como mínimo media hora.

• A la hora de irse a dormir llora mucho, porque no consigue dormirse todo lo pronto que le gustaría.

• Realiza pausas respiratorias.

• En ocasiones o de manera frecuente, respira por la boca.

• Nada más despertarse, muestra una excesiva irritación.

• Durante la noche, es muy habitual que se despierte de manera frecuente. En concreto, requiere atención entre 3 y 5 veces al tiempo que eso se produce en más de tres noches a lo largo de una misma semana.

• Ronca a pesar de su edad.

• Por las mañanas, presenta una palpable dificultad para despertarse.

Medidas de prevención

Para no tener que hacerle frente al problema de que un niño tiene trastornos del sueño, se pueden tomar una serie de medidas de prevención en función de la edad del mismo. No obstante, a nivel general, entre las mismas se encuentran estas:

• Establecer unas rutinas y hábitos de sueño.

• Cumplir con los horarios establecidos para irse a dormir.

• Hacer siempre lo mismo a la hora de llevarlo a la cama.

• La habitación donde descanse debe estar a la temperatura más óptima, debe ser tranquila y no debe existir ruido de ningún tipo.