4 consejos para afrontar el verano con los niños
Cuando llega el verano, los padres se topan con la dificultad de que tienen a los niños en casa permanentemente. Una circunstancia que obliga no sólo a tener una convivencia 24 horas al día sino también a buscarles algún tipo de entretenimiento o actividad para que esos tres meses de descanso escolar les sean llevaderos.
Hay adultos que se agobian por esa situación, ya que no saben cómo hacerle frente a tanto tiempo con los hijos. Sin embargo, no hay que estresarse. Lo mejor que se puede hacer es seguir a rajatabla los siguientes consejos:
1-Una posibilidad: campamentos de verano
Hasta que los padres tomen las vacaciones también y para evitar tener que dejarles con familiares, una buena alternativa es que se mande a los niños a pasar unos días a un campamento. De esta manera, no sólo se divertirán con otros pequeños de su edad sino que además incluso pueden aprovechar el tiempo para mejorar en asignaturas como el inglés. Por supuesto, no hay que olvidar que también hay otros campamentos que sirven para que los menores puedan disfrutar de algún hobby que tengan como sería la cocina o el deporte, por ejemplo.
2-Tareas escolares ¿sí o no?
Una de las preguntas que se hacen muchos padres en el verano es si deben obligar a sus hijos a realizar ejercicios como los que han venido haciendo en el colegio durante el curso. En este sentido, los profesionales de la psicología y los educadores coinciden en subrayar que es importante que los más pequeños no se olviden de lo que han aprendido en clase. Por eso, para que no pierdan los conocimientos que adquirieron es interesante que, de lunes a viernes, lleven a cabo varios ejercicios pero, eso sí, no más de 30 o 40 minutos al día. Y es que es verano, están de vacaciones y tienen que disfrutarlas.
3-Adquirir hábitos
Otra de las recomendaciones más importantes que se le dan a los padres de cara a que puedan “superar” con éxito las vacaciones de verano con sus hijos es que les ayuden a adquirir hábitos óptimos para su vida en general. En concreto, se considera que esos meses son ideales para conseguir que los más pequeños aprendan a valorar y disfrutar de actividades recomendables para su presente y su futuro. Con esto nos referimos tanto a realizar deporte como a leer e incluso a gozar del aire libre.
4-Recuperar el tiempo perdido
Durante el resto del año, los padres, por culpa de sus complicadas agendas profesionales, no pueden disfrutar de todos los momentos que les gustaría con sus hijos. Por eso, el verano es un momento idóneo para recuperar ese tiempo perdido. ¿Cómo hacerlo? Llevando a cabo actividades en familia, que estrecharán los lazos entre adultos y menores y que servirá a los primeros para conocer más a sus pequeños. Alternativas al respecto hay muchas: ir al cine, realizar una ruta senderista, dar un paseo en bicicleta, disfrutar de una jornada en la piscina o en la playa, leer juntos, preparar unidos la comida, acudir al parque de atracciones…