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La caja de los tesoros es un regalo ideal para bebés

A partir de los seis meses ya podemos empezar a crear esta caja de tesoros que tendrá todo lo necesario para conseguir que el bebé descubra el mundo.

La caja de los tesoros es un regalo ideal para bebés
La caja de los tesoros es un regalo ideal para bebés
Gemma Meca
  • Gemma Meca
  • Licenciada en Historia, máster en Periodismo y Comunicación Digital. Redactora en Ok Diario. Cuento historias, soy amante de los astros, sigo a la luna, los TT de Twitter y las tendencias en moda. Experta en noticias de consumo, lifestyle, recetas y Lotería de Navidad.

Las enseñanzas de la pedagogía Montessori para educar a los niños son seguidas por muchos padres y educadores. Elionor Goldschmied es la británica que creó el concepto de caja de los tesoros. Un bebé que empieza a descubrir el mundo no necesitará grandes regalos, los pequeños pueden sentirse más atraídos por los objetos cotidianos, las cajas o los tejidos brillantes que un regalo muy caro. Crear una caja de los tesoros con algunos objetos que llaman la atención de los pequeños puede acabar siendo el mejor regalo de estas Navidades.

Un regalo perfecto: La caja de los tesoros

A partir de los seis meses ya podemos empezar a crear esta caja de tesoros que tendrá todo lo necesario para hacernos disfrutar. Cuando el bebé empieza a querer descubrir el mundo y sentirse atraído por ciertos objetos que le rodean. Cada vez que descubra un objeto que le guste la tendencia es ponérselo a la boca, chuparlo y experimentar con él.

Debemos dejar a los niños que experimenten con las formas y las texturas de los objetos que le rodean. Los juguetes son en esencia una imitación de la realidad, creada de forma artificial para poder aprender todo lo necesario del mundo que les rodea. Hacerles una caja de tesoros es una manera de enseñarles sin invertir dinero.

Elementos de la caja de tesoros

  • Una cuchara de madera para que pueda experimentar con este elemento. Un peine o una brocha también son buenas opciones, deben ser grandes y estar limpios.
  • Unas llaves grandes o unas cucharas de metal son brillantes y llamarán su atención. Las lavaremos cada día que el niño los use. Podrá disfrutar de unas piezas cotidianas que más adelante usará.
  • Una toalla pequeña para que pueda empezar a asearse. Los tejidos como las toallas o las manoplas pueden parecerle atractivos. Los podemos mojar con él para que empiece a notar como cambian de textura al entrar en contacto en el agua.
  • Una botella de plástico o una pinza para el pelo será ideal para esta caja de los tesoros. Les quitamos las etiquetas o cualquier elemento que pueda ser perjudicial, el tapón por ejemplo puede hacerle daño.

Podemos colocar todo esto en un cesto de mimbre o una caja de cartón para que el niño descubra un nuevo elemento. Le servirá para que pueda aprender a recoger sus pequeños tesoros y tener un lugar donde guardar sus cosas más adelante. Esta caja de los tesoros será una manera de aprender y descubrir el mundo con sus propias manos.

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