Virginia Torrecilla, premio Valores del Deporte
"Estoy emocionada y sólo puedo dar las gracias de todo corazón"
Atronadora ovación a la mallorquina en la Primera Gala del Fútbol Femenino
"Creo que soy un personaje público y que puedo ayudar a otras personas"
Su vuelta a los terrenos de juego está más cercana que nunca
Seis jugadoras mallorquinas militan en la Liga Iberdrola de fútbol femenino
La jugadora mallorquina del Atlético de Madrid y de la Selección Española, Virginia Torrecilla, recibió anoche el Trofeo Valores del Deporte durante la Primera Gala del Fútbol Femenino Europeo celebrada en la Antigua Fábrica Damm.
El galardón fue entregado por parte de Elena Gris, directora de Marketing de Hyundai España, acompañada de una atronadora ovación por parte de los presentes. El momento más emotivo de la noche fue cuando Virginia Torrecilla pronunció un discurso muy conmovedor recordando el camino que le ha llevado a superar un cáncer para volver a la competición profesional: “Muchas gracias a todo el mundo y a la gente que hace posible todo esto por el fútbol femenino. Gracias por otorgarme este premio tan especial… Estoy emocionada y solo puedo dar las gracias de todo corazón. Para mí es un placer estar aquí y quiero agradecer a los que han hecho posible estas cosas que tanto ayudan al fútbol femenino”.
La centrocampista mallorquina se quiso acordar de dos pilares fundamentales en su lucha por superar su enfermedad, ya que tanto el seleccionador nacional, Jorge Vilda, como su compañera en el combinado español, Alexia Putellas, han estado al lado de la balear en los momentos más complicados: “Quiero daros las gracias por todo lo que habéis hecho por mí. Agradeceros tanto a vosotros como a vuestra familia vuestra gran ayuda”.
Hay que recordar que a la actual futbolista del cuadro rojiblanco se le diagnosticó un tumor en el cerebro en mayo de 2020. Un cáncer del que se recuperó después de someterse a radioterapia y quimioterapia, y que hasta el día de hoy le ha arrebatado su sueño de seguir compitiendo en la élite mundial. Aún así, la mallorquina nunca ha perdido su sonrisa y se ha convertido en un gran ejemplo de lucha y superación para todo el mundo. “Creo que soy un personaje público y que puedo ayudar a otras personas. Mucha gente me ha escrito para contarme su historia. Es gente que sigue luchando y para mí es increíble. Puedo enseñar, pero también puedo aprender: para mí eso es lo más bonito de todo”, declaró emocionada el día que recibió la medalla de San Isidro el pasado mes de mayo.
La centrocampista empieza a ver la luz al final del túnel, ya que su vuelta a los terrenos de juego está más cercana que nunca. Se espera que en las próximas semanas los aficionados al balompié puedan disfrutar de una de las mejores futbolistas españolas de la historia.