La Policía investiga si los marroquíes que huyeron de un avión en Palma tenían un plan orquestado
Los versiones que ofrecen los 12 detenidos son contradictorias acerca del motivo que les empujó a escapar
El juez determinará su posible imputación por un delito contra la seguridad en el tráfico aéreo
12 de los 24 que huyeron se encuentran en estos momentos en paradero desconocido
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La delegada del Gobierno en Baleares, la socialista Aina Calvo, confirmó a mediodía de hoy que la Policía investiga si los 23 marroquíes y un ciudadano de origen palestino, que huyeron ayer por las pistas del aeropuerto de Son Sant Joan tras fugarse de un avión procedente de Casablanca, tenían un plan organizado.
«Las hipotesis son varias», afirmó Calvo, que confirmó que tras la toma de declaración a los 12 detenidos por este suceso, inédito en España, «las versiones de los arrestados son contradictorias».
«Llevaban bastante tiempo ya aterrizados en el aeropuerto y tampoco descartamos que hubiera una situación de nerviosismo en esas personas y eso les empujara a escapar del avión o quizás tenían un plan organizado previo», indicó la delegada.
La política socialista apuntó que «en estos momentos desconocemos con exactitud qué les empujó y no tenemos datos concluyentes de que se trate de una actuación orquestada y planificada, pero con la cautela de que la investigación está abierta».
Los detenidos pasarán en las próximas horas a disposición judicial y, será el juez, el que determine si se les imputa, además de la entrada ilegal a España y su correspondiente expulsión, un delito contra la seguridad en el tráfico aéreo lo que condicionaría su devolución a Marruecos.
Los hechos tuvieron lugar alrededor de las 19.00 horas de ayer viernes, cuando un Airbus 320 procedente de Casablanca y con destino Estambul de la compañía Air Arabia Maroc, tuvo que aterrizar en el aeropuerto de Palma por una emergencia médica. Un pasajero sufrió un coma diabético y tuvo que ser trasladado en ambulancia, junto con un acompañante al Hospital de Son Llàtzer, en Palma.
En el momento de su evacuación, 21 pasajeros salieron corriendo por las pistas, y otro, fue arrestado en el momento de requerírsele la documentación. La Guardia Civil empezó a buscarlos y se procedió al cierre del aeropuerto y del tráfico aéreo hasta las 23.50 horas, cuando Son Sant Joan volvió a recuperar la normalidad y se reanudó la actividad en las pistas.
El pasajero enfermo que provocó la emergencia tenía un parte médico que acreditaba su dolencia aunque, posteriormente, fue dado de alta y detenido a las pocas horas de ingresar en Son Llàtzer.
La delegada del Gobierno confirmó que una vez que finalice la investigación, las autoridades valorarán si hay que hacer una revisión de los protocolos de seguridad aeroportuarios en los casos de aterrizajes por emergencia médica.
«Lo primero que tenemos que hacer es acabar la investigación y poder tener claras las causas», manifestó la delegada del Gobierno, que aseguró que en este caso, «no se ha dejado de hacer nada que no se haga cuando tenemos una situación así en el aeropuerto».
El aeropuerto de Palma es un aeródromo sanitario internacional donde es habitual que se produzcan este tipo de solicitudes de aterrizajes por emergencia médica. En el avión de Casablanca el procedimiento seguido, según manifestó Calvo, «fue el habitual, lo que no es habitual es que haya pasajeros que decidan incumplir las normas internacionales».
No obstante, también avanzó que «habrá que valorar si esto ha sido un caso aislado, ver los factores que lo han provocado y si es conveniente revisar los protocolos, pero en este caso, repito, se han seguido todos los pasos reglamentarios».