Podemos desaparecerá en Baleares: echa a todos los trabajadores a la calle
La formación morada pasó de seis diputados en el Parlament a tan sólo uno tras el 28M
Preparan un ERE que afectará a todos los empleados en las islas
La debacle electoral ha provocado una fuerte caída de ingresos en el partido
La única diputada electa de Podemos en Baleares dice que el partido debe «asumir responsabilidades internas»
Tras los malos resultados de Podemos Baleares en las pasadas elecciones autonómicas del pasado 28 de mayo, que pasó de seis diputados a tan sólo uno en el Parlament y desapareció totalmente en el Consell de Mallorca, el partido va a bajar las persianas y echará a la calle a los ocho trabajadores que hay a día de hoy en el archipiélago. Un «nuevo escenario» el que se enfrenta la formación y que deberá asumir su nuevo papel de irrelevante a nivel político y el despido de la mitad de su plantilla en todo el país por la masiva pérdida de ingresos.
La formación morada ya ha abierto un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que supondrá el despido de todos los empleados en las islas. Un proceso que, según fuentes de Podemos, ya se ha puesto en marcha y el siguiente paso es abrir un periodo de negociación entre todos los implicados y que podría durar un mes.
Los resultados de las últimas elecciones autonómicas fueron estrepitosas para la formación que se presentó con Antònia Jover como candidata. El partido pasó de seis diputados en el Parlament y a ser socios clave del Govern de la ex presidenta Francina Armengol a ser totalmente irrelevantes con tan solo un diputado. En el Consell de Mallorca perdió los tres representantes obtenidos en los comicios del año 2019, por lo que ha desaparecido de la Cámara Insular.
Según informa El Periódico de España y Diario de Mallorca, esta situación ha provocado una caída fuerte de todos los ingresos tanto a nivel autonómico (90%) como a nivel nacional (70%). De hecho, la plana mayor de la formación en Baleares ya presentó su dimisión tras los malos resultados del 28M pusieron su cargo a disposición del Consejo Ciudadano Autonómico para no abrir una lucha interna.
Y es que el 28M es una mancha negra en la historia del partido morado. Podemos perdió más de dos tercios de sus representantes autonómicos -de 47 diputados pasó a 15- y desapareció por completo en los parlamentos de cinco de las 12 comunidades donde se celebraron elecciones autonómicas.
La organización que fue liderada por Pablo Iglesias ha anunciado a los trabajadores una «profunda reorganización en todos los ámbitos para adecuarnos al descenso de recursos». Se prevé que de los 106 trabajadores afectados, al menos 45 de ellos perderán su trabajo como miembros de Podemos. Se calcula que se trata de más de un 10% de los trabajadores.
Pero no sólo es la federación de Baleares la que sufrirá cambios por la debacle electoral. Se despedirán a los trabajadores en Aragón (5), Asturias (7), Canarias (6), Castilla-La Mancha (4), Cantabria (1), en Galicia (3), Comunidad de Madrid (4) y la Comunidad Valenciana (7). Tal y como informa el partido, «la extinción de los contratos y el cierre de los centros de trabajo».
Los representantes políticos no recibirán, en ningún caso, ingresos del partido y quedarán reducidos a lo meramente simbólico.