baleares

Palma gastará 450.000 euros para que circulen los cinco buses de hidrógeno parados hace año y medio

La EMT adquirirá un dispensador provisional de hidrógeno para la carga de estos vehículos

Los autobuses que costaron cada uno de ellos un millón de euros nunca han funcionado

Palma hidrógeno
El ex alcalde socialista de Palma, José Hila, con la presidenta del Congreso, Francina Armengol, a bordo de uno de los autobuses de hidrógeno.
Indalecio Ribelles
  • Indalecio Ribelles
  • Redactor de OKBaleares, información local de Palma, social y política. Antes, redactor en EL MUNDO/ Baleares durante 20 años.

El Ayuntamiento de Palma gastará 450.000 euros para que puedan circular los cinco buses de hidrógeno que nunca funcionaron y que llevan año y medio aparcados en las cocheras, desde que fueran adquiridos en marzo de 2023 por el anterior equipo de gobierno del ex alcalde socialista José Hila por 4.832.135 euros.

Unos autobuses que en estos momentos permanecen estacionados en la planta de hidrógeno de Lloseta al no poder ser abastecidos de combustible, dado que esta instalación tampoco está activa por problemas técnicos que están en vías de ser solventados.

El único autobús de hidrógeno del ex alcalde socialista Hila que vio las calles de Palma fue uno de 18 metros articulado, que resultó ser de exhibición y que no prestó servicio a los ciudadanos. Sólo sirvió para fotos y propaganda del anterior gobierno municipal, incluyendo el viaje por las calles del centro de Palma del ex primer edil palmesano con la actual presidenta del Congreso, Francina Armengol.

Si bien la actual dirección de la EMT buscó la alternativa de traer el hidrógeno por barco y sacó a concurso su importación, éste quedó desierto en dos ocasiones. El motivo es que la normativa marítima es muy estricta en cuanto a la seguridad del transporte de las mercancías peligrosas y hay una limitación de la presión (200 bares) de los depósitos de hidrógeno.

Los autobuses del millón de euros del ex alcalde Hila necesitan una presión tan alta (350 bar), que esa limitación impide que el vehículo pueda cargar con eficacia el hidrógeno para llenar su depósito. Con esa presión sólo alcanza a una capacidad de carga de entre el 12 o 15% del depósito y no pueden prestar servicio.

Ante este desaguisado, la compañía tuvo que endeudarse en enero pasado en siete millones de euros para pagarlos aunque siguen estando estacionados.

Ahora la EMT ha iniciado los trámites para contratar un dispensador provisional de hidrógeno para poder cargar los vehículos en la cochera de la compañía mediante tubos o tanques de hidrógeno de alta presión

El contrato incluye, además de la estación de repostaje, todas las medidas de seguridad, mantenimiento integral y operatividad. Dicho sistema permitirá el suministro de hidrógeno a una presión de hasta 350 bar y, con ello, la carga de estos vehículos.

En una primera fase, con una duración prevista de cinco meses, se realizarán las labores de ingeniería previa (proyectos, replanteos, estudios de seguridad, aprobación por el órgano de contratación, legalizaciones, etcétera), así como el suministro, instalación y puesta en marcha del sistema de dispensación.

En ese plazo debe estar operativo, incluyendo los proyectos y legalizaciones necesarias, si bien no se descartan posibles retrasos no previstos por la administración.

Plataformas rodantes con hidrógeno comprimido

A los 137.000 euros anuales que costará este sistema, hay que sumar 220.000 euros adicionales para el suministro de hidrógeno, incluyendo el transporte mediante tubos o tanques y su descarga hasta las válvulas de entrada del sistema de dispensación.

La entrega de hidrógeno en las instalaciones de EMT se llevará a cabo mediante plataformas rodantes con hidrógeno comprimido, que tendrán que permanecer estacionadas hasta su descarga parcial, de forma tal que quede garantizada la carga de combustible a los autobuses a una presión superior a 225 bar, sin compresiones adicionales. Esto permitirá a la EMT efectuar recargas a diario, y a cualquier hora, con una presión comprendida entre unos 225 y 350 bar.

Las cargas de hidrógeno a los autobuses serán efectuadas por personal de EMT formado por el contratista. Las conexiones y desconexiones con el dispensador serán realizadas por personal del adjudicatario en el momento de cambio de plataformas.

La adquisición de estos inutilizados vehículos fue financiada por el Govern a través de la Ley de Capitalidad (2,6 millones). También recibió el Ayuntamiento un millón procedente del Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDAE) del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. El millón restante fue aportado por las arcas municipales  a través de la EMT.

Lo último en OkBaleares

Últimas noticias