La foto del Rey y las banderas de España y Baleares regresan a la empresa municipal de limpieza de Palma

Tras ocho años de gobierno de coalición de socialistas, independentistas de Mes y Podemos en el Ayuntamiento de Palma, la foto del Rey Felipe VI vuelve a presidir la sala de juntas de la sede de Emaya y las banderas de España y Baleares ondean desde hace unos días en lo más alto de la fachada de la empresa municipal de limpieza de Palma.

Si bien los ciudadanos juzgarán la gestión del teniente de alcalde de Medio Ambiente, Llorenç Bauzá, por el trabajo que los operarios de la mayor compañía municipal hagan a pie de calle y, en especial, si consigue que Palma deje de ser la ciudad más sucia de España -según la OCU-, hay gestos con los que el edil del PP marca distancias con sus antecesores en el cargo y que ponen de manifiesto su compromiso institucional.

Basta recordar que en 2017, cuando el alcalde independentista de Més Antoni Noguera, tomó por dos años el relevo de su socio socialista José Hila al frente de la Alcaldía de Palma, su primera decisión fue retirar de su despacho la fotografía del Rey.

En su lugar Noguera, ya retirado de la política, colocó una imagen del último alcalde republicano de la capital balear, Emili Darder, fusilado el 24 de febrero de 1937. La única imagen de Felipe VI que mantuvo, y porque no tuvo más remedio, fue el busto del Rey que arrinconó en un lateral del salón de plenos.

La compañía municipal Emaya estuvo presidida entre 2015-2019 por la concejala independentista de esta misma formación, Neus Truyol, que no sólo procedió a la retirada de la imagen del Rey de la sala de juntas, sino que en los diez años que lleva dedicada a la política municipal se ha caracterizado por sus continuos ataques a la monarquía.

Unas proclamas antimonárquicas que se vienen sucediendo cada verano con motivo de la visita de la Familia Real al Palacio de Marivent y que son tan habituales como lo fueron las críticas a su nefasta gestión al frente de Emaya hace cuatro años y durante la pasada legislatura como concejala del área de Modelo de Ciudad, hasta el punto de colapsar la gestión del departamento de Urbanismo.

En principio, los primeros pasos del nuevo presidente de Emaya no sólo van dirigidos a marcar distancias simbólicas con el anterior gobierno de izquierdas, sino también en materia de gestión. No se han cumplido ni cien días al frente de la misma y Llorenç Bauzá se ha convertido en este arranque de la legislatura en uno de los concejales que mayor protagonismo está teniendo en el nuevo gobierno municipal del PP.

Entre otras iniciativas que llevan su firma, figura la puesta en marcha del esperado plan de choque de limpieza, la contratación de 50 nuevos barrenderos para reforzar un servicio más que deficiente durante los pasados ocho años y el borrado, desde que aterrizó en el cargo el pasado mes de julio, de más de 1.100 pintadas vandálicas que ensucian las fachadas de calles y edificios del centro de Palma.