El alcalde de Palma se ensaña con el funcionario que denunció irregularidades y le niega la plaza

El alcalde de Palma, el socialista José Hila, se ensaña con el jefe de contratación que se negó a tramitar «asuntos ilegales» y le niega la plaza de jefe de departamento de Gobierno Interior, para la que era el único de los dos aspirantes al puesto que cumplía con todos los requisitos exigidos.

Juan Carlos Sastre fue destituido a finales del pasado año por el concejal de Podemos Alberto Jarabo y el primer edil Hila, tras 15 años en el cargo, por no plegarse a firmar lo que él consideraba que eran irregularidades en la salida a concurso del recinto comercial municipal de S’Escorxador.

Ahora, el gobierno municipal de coalición de socialistas, independentistas de Més y Podemos vuelve a castigar a este funcionario, en concreto, el concejal socialista de Hacienda, Innovación y Función Pública, Adrián García, que es quien rubrica esta decisión que puede acabar en los tribunales, al haber sido adoptada con una notable dosis de arbitrariedad y con una dudosa base jurídica.

Pero la resolución ya ha sido firmada por García, que ha decidido dejar desierta la convocatoria a pesar de que Sastre cumplía con todos los requisitos para obtener la plaza.

La decisión del gobierno municipal ha venido acompañada de la reedición de la convocatoria y su salida de nuevo a concurso, aunque con un matiz: la modificación de las bases de la convocatoria y de los requisitos académicos y de experiencia a la baja, de los aspirantes a ocuparla.  Una maniobra de más que dudosa legalidad, y que puede tener  consecuencias legales.

Las sospechas entre los funcionarios es que detrás de estas decisiones del gobierno de Hila se podría encontrar la confección de un traje o plaza a medida para alguien que hasta ahora no reunía los requisitos exigidos, ya que ni tenía licenciatura en Derecho ni en Económicas, ni los tres años de experiencia obligatorios que se exigían.

El gobierno municipal modificó a la baja en julio pasado los requisitos que hasta entonces se exigían para ocupar el puesto, abriendo el abanico a que pudieran presentarse, graduados en Administración y Dirección de Empresas, que se considera equivalente a las otras dos licenciaturas, o tener tres años de experiencia en la materia, que ya no es requisito obligatorio.

Una chapucera y retorcida forma de proceder de Hila y Jarabo que habrá que ver qué resultado tiene, una vez que sea adjudicada la plaza de jefe de departamento de Gobierno Interior del Ayuntamiento de Palma.

Tras su cese antes de las pasadas navidades, Juan Carlos Sastre remitió un comunicado de despedida a la plantilla de funcionarios municipales recordando que «nunca acepté tramitar y firmar asuntos que considero ilegales».

Detrás de su defenestración por parte del alcalde socialista Hila y del edil Jarabo de Podemos, está su negativa a aceptar las condiciones impuestas por el gobierno municipal para la contratación del nuevo concesionario del centro comercial y cultural de S’Escorxador, cuya gestión recuperó el Consistorio en esas mismas fechas navideñas.