El paro del transporte deja en Andalucía más de 400 ERTEs anunciados para la próxima semana
La Junta de Andalucía advirtió esta semana de que la huelga de transporte desencadenaría una «avalancha» de ERTEs en la comunidad y una caída del PIB andaluz de entre dos y dos puntos y medio. Desgraciadamente, la primera parte del vaticinio ya se ha cumplido: hay anunciados más de 400 ERTEs en la región para la semana que viene.
Así lo ha avanzado este viernes la consejera de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo de la Junta, Rocío Blanco, en declaraciones a los periodistas en Córdoba. El paro nacional del transporte de mercancías por carretera, que alcanza ya su decimosegunda jornada, sumado a los disparatados precios de la electricidad, el gas y los combustibles, ha desatado la «tormenta perfecta», señala Blanco.
La consejera andaluza ha manifestado que la huelga ha creado «cierta incertidumbre» respecto a «cuánto puede a afectar», si bien «lo que sí es cierto es que va a afectar al crecimiento», pues habrá «un menor PIB» y también «una menor creación de empleo», mientras que «la tasa de inflación, que ya la tenemos en el 7%, se está aventurando a que pueda llegar a los dos dígitos».
«Todo eso -ha advertido- es la tormenta perfecta para que el crecimiento, desde el punto de vista del empleo, no sea tan robusto como todos desearíamos, pues ya nos están anunciando muchas empresas que la semana que viene, si todo continúa así, van a presentar ERTEs y, de hecho, ya tenemos anunciados más de 400 ERTEs para la semana que viene a nivel de Andalucía».
Así será, según ha insistido la consejera, «si los paros se siguen prolongando y si no hay acuerdo para la bajada de los precios de la energía con el Gobierno de España, que si bien se han agravado tras «la invasión de Ucrania por parte de la Federación Rusa», era «una problemática que existía antes y que existe a nivel de toda Europa».
La diferencia, según ha lamentado, es que «todos los países europeos, a excepción de España, han puesto ya sobre la mesa y están aplicando reducciones significativas para el precio de la electricidad y del gasóleo», ha recalcado.
En cualquier caso, Blanco ha reconocido que las consecuencias de la invasión de Ucrania y del paro del transporte no han provocado aún la presentación de ningún expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) en Andalucía, pues el que «presentó Acerinox hace una semana» fue «con acuerdo y, además, por causas ETOP», es decir, por «causas económicas, técnicas, organizativas o de producción».
Sin embargo, «para la semana que viene algunos sectores han anunciado que habría unos 400 ERTEs», aunque «lo que nos puede venir» está por ver, esperando la consejera que «no sea como en la primavera de 2020», cuando «nos llegaron a entrar 100.000 ERTE en sólo dos meses», mientras que «en todo 2019 nos habían entrado 2.169, tanto por fuerza mayor, como por causas ETOP», añadiendo Blanco que, «si las circunstancias que ahora mismo adornan el mercado de trabajo no mejoran, sí que prevemos una avalancha muy significativa de ERTEs».
La consejera ha detallado que en la provincia de Córdoba «hay sectores que están muy afectados» por las consecuencias del paro de los transportistas, de modo que la metalúrgica Cunext, «una empresa puntera a nivel nacional del cobre, ya ha anunciado que va a presentar un ERTE, pero es que también afecta al sector del aceite y de la aceituna de mesa, que también está barajando empezar a presentar ERTE», lo mismo que los sectores del «frío industrial y la madera», al igual que «está valorando presentar un ERTE Pastas Gallo».
Acuerdo «insuficiente»
En cuanto al acuerdo que ha cerrado el Ejecutivo central con el Comité Nacional de Transporte por Carretera (CNTC) y que ya ha rechazado la plataforma que ha convocado el paro en el sector, Blanco ha recordado que la Junta eximirá a los pescadores de pagar las tasas portuarias y bonificará las tasas al sector agrario, y además ha pedido al Gobierno de Sánchez «que se reduzca el IVA, tanto de los comestibles» como de «los hidrocarburos, del gas y de la electricidad», de los cuales «la comunidad autónoma percibe el 50%».
Ello es necesario, según ha argumentado, porque el paro de los transportistas no sólo afecta a las empresas, sino también «a las familias», dado que «se están incrementando muchísimo los precios de los comestibles y de la electricidad, y hay familias que ese incremento no lo pueden asumir» y, teniendo en cuenta todo ello, las medidas que incluye el mencionado acuerdo entre el Gobierno y el CNTC «no son suficientes» para la plataforma que ha convocado el paro, y que ha criticado que «no se han sentado con ellos».
Además, a juicio de Blanco, la reducción de 20 céntimos en el precio del litro del gasóleo para los transportistas «tiene que venir acompañado de muchas más cosas», como «ayudas directas de verdad al sector», pues la consejera entiende que los 1.250 euros de ayuda por cada camión que recoge el acuerdo «son insuficientes», y es preciso que «no sean subvenciones a cambio de una efectividad del gasto».
Invasión de Ucrania
Por otro lado, ante la pregunta de si España puede afrontar las consecuencias económicas derivadas de la invasión rusa de Ucrania, la consejera ha indicado que al Gobierno central esta situación «no le ha pillado con los deberes hechos», porque «es el único país europeo que todavía no había recuperado los niveles preCovid», ya que «parecía que se iba a solucionar todo con un gasto sin control y que los fondos europeos iban a venir a aliviar todo, pero nos ha pillado con una deuda que está por encima ya del 120% del PIB».
A esto se suma, ha subrayado, que «los fondos europeos no están llegando al tejido productivo como debieran» y, «de hecho, en 2021, a pesar de que había pintados en los PGE (Presupuestos Generales del Estado) 24.000 millones de euros, efectivamente al tejido productivo sólo llegaron 104 millones de euros», de modo que, según ha reiterado, «les ha pillado sin los deberes hechos», mientras que «otros países tienen mucho más músculo para abordar esta nueva crisis, y por eso están apostando mucho más por la supervivencia del tejido productivo».
En consecuencia, «España se va a tener que apretar los machos, porque sus cuentas no son las mejores», y aunque de cara a 2023 la Comisión Europea sigue apostando «por que no existan las reglas de estabilidad fiscal y financiera, esto no va a ser ‘sine díe’», y el Gobierno tendrá que «aplicar las reglas de sostenibilidad financiera más pronto que tarde», ha zanjado.