Melilla tras el estado de alarma: adiós al toque de queda y libertad para viajar a la Península
Las comunidades autónomas trabajan para reestructurar sus limitaciones una vez decaiga el estado de alarma este 9 de mayo. En el caso de Melilla, el Gobierno de la ciudad autónoma ha anunciado este jueves que a partir de la semana que viene no mantendrá el toque de queda a las 22:00 horas, vigente desde el pasado octubre.
Asimismo, el Ejecutivo melillense descarta el cierre perimetral de la ciudad, por lo que habrá libertada para viajar. Sí que se mantienen las restricciones en reuniones sociales -privadas y públicas-, que queda fijadas en un máximo de seis personas -cuatro en la actualidad-.
Además, la hostelería y el comercio tendrán limitaciones horarias -todavía sin especificar- y los centros religiosos limitaciones de aforo, tal y como ha detallado en rueda de prensa, el consejero de Salud Pública, el socialista Mohamed Mohamed.
Fin del estado de alarma
«Desde la finalización del estado de alarma, el próximo 9 de mayo, no habrá restricción a la movilidad nocturna y, de la misma manera, se elimina el confinamiento perimetral, lo que permite la entrada y salida de Melilla sin necesidad de presentar una justificación», ha avanzado el consejero melillense.
Sin embargo, ha apuntado que va solicitar a las autoridades judiciales permiso para restringir el número de personas que puedan reunirse en el ámbito privado y público. «Actualmente el límite está en cuatro personas y queremos seguir manteniendo las limitaciones, pero a un máximo de seis personas», ha detallado.
Asimismo, Mohamed Mohand ha manifestado que a partir del lunes 10 de mayo tienen previstos reunirse con la asociación de empresarios de la hostelería para abordar las limitaciones en el sector con el final del estado de alarma, porque actualmente cafeterías, bares y restaurantes están obligados a cerrar a las 21:00 horas. «Por supuesto siempre combinando salud con economía», ha subrayado.
El titular de Salud Pública también ha señalado que su área pretende limitar el aforo en oficios religiosos, tanto en iglesias, mezquitas, sinagogas y demás templos de la ciudad, aunque no ha detallado qué porcentaje de asistencia se permitirá a los mismos, que se conocerá cuando la próxima semana se firme la nueva orden sobre medidas contra el Covid-19.