Fin del paripé para aparentar cordialidad entre Podemos e IU en Andalucía: «Confunden a los electores»
IU y Podemos han desenterrado el hacha de guerra en Andalucía una vez han tratado de engañar a sus potenciales votantes aparentando una cordialidad inexistente en Por Andalucía, coalición que integraban ambos partidos en las elecciones andaluzas del pasado 19 de junio. Toni Valero, líder de IU Andalucía, ha acusado directamente a Podemos este sábado de hacer «ruido» constante y de «generan confusión entre los electores».
Valero ha recordado, para encontrar explicaciones a su batacazo electoral, la ruptura del grupo parlamentario de Podemos Andalucía en esta legislatura, algo que «emitió ruido» hasta la propia campaña electoral y, aunque se apostó por un frente progresista amplio que Unidas Podemos «quiso acelerar» desde diciembre, «no se consiguió la suficiente apertura ni un acuerdo de candidatura en tiempo razonable», ha dicho.
Para Valero, el proceso «se vino frustrando desde diciembre» por no entenderlo como «genuinamente andaluz» y se complicó «extremadamente» a partir de marzo, cuando las tensiones estatales generadas por la guerra en Ucrania se trasladaron a la negociación, y se produjo el «bloqueo de la dirección estatal de Podemos para llegar a acuerdos». Como consecuencia, ha explicado, se generó una «incertidumbre» en torno al proyecto que se iba a presentar, en un contexto donde la tensión era «constante por las amenazas de adelanto electoral».
Tras esta incertidumbre y unas arduas negociaciones, finalmente el pacto salió adelante bajo la marca Por Andalucía, que Valero ha catalogado como «una trágala por Podemos, a pocos minutos de que se cerrase el plazo», y que dejaba a IU «en detrimento» y con una «injusta representación» en el grupo parlamentario. Sin embargo, asegura que se siguió adelante para trabajar en un frente amplio, visibilizar la marca e incorporarla al nuevo ciclo electoral.
Por ello, Valero considera que fue una decisión «responsable», pero que se volvió a ver empañada por el «ruido» cuando Podemos no llegó a tiempo al registro y quedara fuera de la papeleta, «generando confusión entre electores» que todavía asociaban a Teresa Rodríguez con Podemos. A ello, recuerda Valero, se suma la destitución en plena campaña de Amanda Meyer, jefa de gabinete del ministerio de Igualdad, de Irene Montero.