Sánchez no desautoriza a Cunillera por los indultos y dice que hace falta más «empatía» con Cataluña

El jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, ha evitado este domingo desautorizar a la delegada del Gobierno en Cataluña, Teresa Cunillera, tras afirmar que los presos golpistas deberían ser indultados si hay sentencia firme del Tribunal Supremo y solicitan esta prerrogativa de gracia al Ministerio de Justicia.

En una comparencia de prensa en Montreal junto al primer ministro de Canadá, el liberal Justin Trudeau, Sánchez se ha limitado a decir que «el Gobierno no se pronuncia sobre hipótesis» sino sobre «realidades», dejando abiertos todos los escenarios.

«En relación con los indultos, yo creo que la reflexión que trasladó la delegada del Gobierno y que yo desde luego comparto es que en la política española y sobre todo cuando estamos hablando de la política catalana, falta empatía», ha manifestado Sánchez ante los medios.

«Ha habido durante demasiados años un lenguaje demasiado grueso, de confrontación, de división, un lenguaje en el que hay que reivindicar la legalidad y el diálogo, pero donde se ha echado en falta esa empatía», ha señalado Sánchez.

«Convivencia»

«La reflexión que yo siempre he hecho es que en Cataluña la prioridad, al menos para este gobierno, es la convivencia; establecer un marco de convivencia en Cataluña», ha incidido.

Sánchez ha hecho estas consideraciones al ser preguntado tanto por las declaraciones de Cunillera (PSC) como de su vicepresidenta, Carmen Calvo, este domingo en una entrevista en La Vanguardia. Calvo, en otra injerencia más del Ejecutivo en el ámbito del Poder Judicial, ha afirmado que «no sería lógico alargar la prisión preventiva» a los golpistas si su juicio se retrasa en el Tribunal Supremo.