¡Dame vino! La fuente de la que no brota agua, sino vino
Si has hecho el camino francés del Camino de Santiago seguramente te haya llamado la atención una peculiar fuente situada en el municipio de Estella-Lizarra. Se trata de una fuente creada en 1991 por las Bodegas Irache que cuenta con dos grifos: uno provee agua y el otro vino. Por lo peculiar del asunto se ha convertido en punto obligado de parada para los peregrinos para recuperar fuerzas antes de seguir andando. Fue allí donde los italianos Dina Cespa y Luigi Narcisi descubrieron este pequeño tesoro enológico y tanto les marcó que quisieron llevarse la idea a su país.
Este matrimonio es el fundador de la organización sin ánimo de lucro Camino de San Tomás, un proyecto que une Roma y Ortona (ciudad en cuya catedral se encuentran custodiados los restos del Apóstol Tomás) a través de un camino de 310 kilómetros que cruza la parte más bella y salvaje de los Apeninos. Miles de peregrinos y viajeros lo han hecho en los cuatro años de vida de este proyecto. La ONG recibió el apoyo de D’Auria, el dueño de la Cantina Dora Sarchese, donde la primera fuente de vino de Italia fue inaugurada hace apenas unos días.
El reputado arquitecto Rocco Valentini ha sido el encargado de diseñarla: “En realidad no es sólo un punto para beber, sino una pieza de arte moderno con un cuidado diseño gracias al trabajo de Valentini. Cogió una gran vieja barrica que tenía para inspirarse. La abrió, hizo una rampa con los ejes por fuera, colocó una piedra y ¡la obra ya estaba lista!”, explican.
Todos los que pasen por la Cantina Dora Sarchese pueden pararse a echar un trago de vino de lunes a viernes de 9 a 12:30 horas y de 15:30 a 19 horas. Los sábados su horario es de 9 a 12:30 horas. Eso sí, al igual que ocurre con la fuente de fino de Bodegas Irache, se trata de una oportunidad para beber el caldo en el momento, ¡no para llevárselo!