Alemania tiene una ruta que la mayoría de turistas desconoce

¿Quieres descubrir la ruta más bonita de Alemania?La Hohenzollernstraße, una ruta histórica que se extiende aproximadamente 300 kilómetros desde el alto Neckar hasta las cercanías del Lago de Constanza, lleva a los viajeros a través de los lugares más destacados de la tumultuosa historia de la Casa del Príncipe en Baden y Württemberg.

En particular, la región de Zollernalb cuenta con diez picos que superan los 1.000 metros de altura, destacando el majestuoso castillo de Hohenzollern como uno de los principales hitos. Este castillo, una obra maestra de la arquitectura de fortificaciones neogóticas del siglo XIX, ofrece vistas impresionantes y alberga el museo del castillo, que exhibe una rica colección de tesoros.

Hohenzollernstraße, la ruta más bonita de Alemania

El comienzo del itinerario se encuentra en el castillo de Sulz-Glatt, desde donde se dirige hacia Haigerloch, una encantadora ciudad con una variedad de lugares de interés. Destacan el castillo de Haigerloch junto con su iglesia, el famoso Museo del Átomo, la Iglesia Rococó de St. Anna, la antigua barraca judía de Haag con su museo en la antigua sinagoga, la iglesia protestante con una réplica de la Última Cena y la Torre Romana con vistas panorámicas impresionantes.

A través de Rangendingen llegarás a Hechingen, donde el Museo Estatal de Hohenzolls es una parada obligatoria para los entusiastas de la historia. Desde aquí, se divisa el majestuoso castillo de Hohenzollern, cuya visita requiere un tiempo considerable para apreciar su interior, sus jardines y sus vistas incomparables.

Continuando hacia la meseta a través de Thanheim y Bisingen, pasarás por el pintoresco paisaje montañoso de Alb cerca de Salmendingen, donde la capilla de Salmendinger es una joya arquitectónica. Luego, a través de Melchingen, Trochtelfingen y Neufra, llegarás a Gammertingen.

Siguiendo el recorrido a través de Hettingen, con su castillo ahora convertido en ayuntamiento, y el hermoso valle del Lauchert hasta Veringenstadt y finalmente a Sigmaringen con su impresionante castillo, situado en un espolón rocoso con vistas al joven Danubio y exuberantes prados verdes que te dejarán con la boca abierta.

Continuando a través de Krauchenwies, Ostrach y Pfullendorf, pasando por el famoso monasterio del bosque y el castillo renacentista de Mekirch, llegarás a Galli, una ciudad monástica carolingia que ofrece una experiencia única de viaje en el tiempo. Luego, a través de Leibertingen hasta el Danubio y Beuron con su monasterio barroco, y finalmente a Albstadt y Balingen, donde el Zollernschloss y la iglesia local del cementerio son puntos destacados.

El recorrido concluye de regreso en Sulz-Glatt, completando así un viaje lleno de historia, paisajes impresionantes y una rica variedad de lugares de interés.

Las ciudades más impresionantes del país

Alemania cuenta con una amplia gama de ciudades encantadoras, cada una con su propio carácter distintivo y atractivos únicos. Berlín, la capital del país, es un crisol de historia y modernidad. Desde la majestuosa Puerta de Brandeburgo hasta la Isla de los Museos, ofrece una experiencia cultural inigualable. Por otro lado, Hamburgo, conocida como la «perla del norte», combina la estética industrial con la belleza natural del río Elba. Además, su vibrante barrio de Sankt Pauli añade un toque de singularidad a esta ciudad portuaria.

Dresde, por su parte, emerge como una joya reconstruida después de la devastación de la Segunda Guerra Mundial. Con su emblemática iglesia de Frauenkirche y los palacios de Zwinger y Residenzschloss, esta ciudad ofrece un viaje al pasado lleno de historia y arquitectura impresionante. Múnich, la joya de Baviera, destaca tanto por su rica tradición cervecera como por su impresionante arquitectura. Desde la famosa cervecería Hofbräuhaus hasta el majestuoso Marienplatz, Múnich es un destino lleno de encanto que merece mucho la pena.

Tréveris, la ciudad más antigua de Alemania, cautiva con su legado romano y su arquitectura medieval. Lugares como las termas romanas y la basílica de Constantino ofrecen una ventana al pasado de esta ciudad histórica. Schwerin, situada a orillas de un lago, se distingue por su hermoso castillo y sus encantadoras plazas. Su ambiente tranquilo y pintoresco la convierte en un destino perfecto para una escapada relajante.

Friburgo, conocida como la puerta de entrada a la Selva Negra, ofrece un ambiente animado y acogedor. Con su impresionante catedral y sus estrechas callejuelas, esta ciudad universitaria es un destino popular durante todo el año. Por otro lado, Colonia impresiona con su imponente catedral gótica y su vibrante vida cultural. Además, su famoso mercado de Navidad atrae a visitantes de todo el mundo durante la temporada festiva.

Fráncfort, una ciudad moderna con una rica historia, combina la tradición con la innovación. Sus rascacielos futuristas contrastan con el encanto de su casco antiguo, creando un ambiente único. Finalmente, Bamberg y Rotemburgo ofrecen un vistazo a la Alemania medieval con sus calles empedradas y su arquitectura tradicional. Estas ciudades son verdaderas joyas que mantienen viva la esencia del pasado en el corazón de Europa.