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Alberto Pascual, Executive Director de Ingram Micro: «Vivimos en un mundo gobernado por datos»

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Nacho Grosso
  • Nacho Grosso
  • Cádiz (1973) Redactor y editor especializado en tecnología. Escribiendo profesionalmente desde 2017 para medios de difusión y blogs en español.

En el marco del 21º Simposium de Ingram Micro, celebrado en la Fira de Barcelona, tuvimos la oportunidad de conversar con Alberto Pascual, Executive Director de Ingram Micro, acerca de los retos y oportunidades que enfrenta el sector IT. Bajo el lema «Redefiniendo la distribución», este evento, consolidado como un punto de encuentro esencial para más de 2.500 profesionales del canal tecnológico, pone de manifiesto las tendencias más recientes y el papel clave de la innovación en la transformación de la distribución.

Pregunta. — ¿Cómo se valora este nuevo simposio de Ingram Micro que cumple su segunda edición en este espacio de la Fira?

Respuesta. — Bueno, pues la verdad es que estamos muy contentos porque se está cumpliendo el objetivo que nosotros buscamos. Vemos que todo el entorno tecnológico es cada vez más complejo y los integradores buscan tener un punto único en el que, en muy poco tiempo, puedan ver a los jugadores clave de las tecnologías troncales, además de a todos los representantes de esas tecnologías que permiten abordar esa complejidad. Bueno, pues también alimentar al mercado con la solución completa. Y, en ese sentido, es lo que buscamos aquí, ¿no? Que tengan el ecosistema perfectamente representado, y estamos muy contentos porque lo estamos consiguiendo un año más.

P. — ¿Este año por qué habla Ingram Micro de «redefiniendo la distribución»?

R. — Bueno, pues porque creo que en otros sectores ya sucedió. Ha habido un cambio de paradigma empresarial, que ha sido la transformación del modelo de negocio hacia modelos de negocio de plataforma. Como consumidores, estamos ya muy habituados a ser usuarios de plataformas de vídeo bajo demanda o de música bajo demanda. Eso faltaba en nuestro sector, una plataforma que diese servicio a todo ese ecosistema de fabricantes, integradores, proveedores de soluciones tecnológicas y que facilitase la colaboración entre ellos. Creemos que eso va a cambiar radicalmente el entorno de la distribución. Por eso hablamos de redefinición.

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P. — En la rueda de prensa se han mencionado dos de los principales retos: tanto el clima como la salud.

R. — Hay una preocupación enorme por la sostenibilidad del medio ambiente. Y así como la propia tecnología ha planteado algunos retos enormes, lo estamos viendo con la inteligencia artificial. La inteligencia artificial es muy intensiva en energía, y también en emisiones de gases. Y, bueno, igual que la tecnología ha generado ese incremento en el deterioro medioambiental, la tecnología también está proveyendo las soluciones necesarias para resolverlo. Por ejemplo, estamos avanzando hacia paradigmas de computación menos intensivos en consumo de energía, nuevos modelos de elaboración y entrenamiento de algoritmos para la inteligencia artificial también menos intensivos en energía. Todo eso está generando un entorno tecnológico que ofrece soluciones.

P. — Es una preocupación mayor para el sector tecnológico la sostenibilidad, porque si no, no lo ve viable.

R. — Claro, ese es el reto. El entrenar un algoritmo, pues hay muchos símiles que circulan en el mercado, pero es enorme. Estamos hablando de consumos equivalentes a lo que consumía una ciudad de tamaño medio durante un año. Entrenar un algoritmo es, como decía, muy intensivo en energía. También es necesario encontrar alternativas que permitan hacer ese mundo sostenible. Y luego está todo el tema de la salud. Desde luego, el mundo médico… Los profesionales de la medicina lo dicen: antes se tardaba entre 50 y 100 años en duplicar el conocimiento médico. Ahora estamos hablando de que en 10 años se está duplicando el conocimiento que tenemos del cuerpo humano, de cómo abordar sus patologías y de cómo, preventivamente, evitar que se produzcan.

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En eso está teniendo un papel esencial la tecnología: la biotecnología, la aplicación de tecnologías de la información y de la inteligencia artificial. Ayudan a identificar patrones y anticipar determinadas patologías, y también a acortar el desarrollo de medicamentos muy específicos. Ir hacia la personalización… La inteligencia artificial ya lo permite. Ya sucedió en el consumo. Este ha sabido identificar hábitos muy concretos y dar una respuesta personalizada. Pero lo mismo está sucediendo en el ámbito de la medicina. Patologías que antes se trataban con una receta única para todos ahora se están tratando de manera específica para cada individuo, con una solución personalizada. Yo creo que eso hará —lo está haciendo ya— que el conocimiento y la eficacia de la medicina aumenten de manera exponencial.

P. — Ya para finalizar, parece que al usuario estándar, que quizás tiene un conocimiento mínimo de tecnología, hablar de inteligencia artificial le suena a ChatGPT exclusivamente ¿Cómo está la inteligencia artificial cambiando ya su vida? ¿Cuáles son, principalmente, las cuestiones más tangibles que una persona común desconoce que la inteligencia artificial está haciendo por su bien?

R. — Desde el punto de vista de consumidores, ya digo que estamos continuamente expuestos a soluciones que nos permiten una mayor personalización a la hora de atender nuestras necesidades concretas. Por ejemplo, creo que todos estamos acostumbrados a trabajar con plataformas de comercio electrónico que nos hacen sugerencias de productos complementarios a los que inicialmente demandamos o nos hablan de tendencias de mercado y nos permiten anticiparnos. Pero lo que decía, en el día a día, la inteligencia artificial lleva ya desplegada muchos años. En el tráfico ferroviario, por ejemplo, todos los sistemas de control de tráfico ferroviario llevan ya inteligencia artificial embebida desde hace tiempo.

En los sistemas de seguridad, para identificar patrones de comportamiento delictivo, también lleva años utilizándose. Está detrás de esas cámaras de videovigilancia, anticipando posibles comportamientos delictivos. Es que la transversalidad de la inteligencia artificial es enorme. Ahora casi cualquier sueño que podamos tener tiene una respuesta basada en inteligencia artificial, porque, en definitiva, la inteligencia artificial es muy ágil procesando datos y convirtiéndolos en utilidades, y eso es totalmente transversal. Es cierto que vivimos en un mundo gobernado por datos, y, como decía, la inteligencia artificial puede aportar soluciones en todos los ámbitos.

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