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El cambio de vida de Ángel Martín: de estrella de la televisión a ingresar en un psiquiátrico

El cambio de vida de Ángel Martín: de estrella de la televisión a ingresar en un psiquiátrico
El cambio de vida de Ángel Martín: de estrella de la televisión a ingresar en un psiquiátrico
Gemma Meca
  • Gemma Meca
  • Licenciada en Historia, máster en Periodismo y Comunicación Digital. Redactora en Ok Diario. Cuento historias, soy amante de los astros, sigo a la luna, los TT de Twitter y las tendencias en moda. Experta en noticias de consumo, lifestyle, recetas y Lotería de Navidad.

Ángel Martín es una cara conocida de la televisión que ha ayudado a hacer más visible las enfermedades mentales después de ingresar en un psiquiátrico. Nos hemos reído con Martín, pero también hemos llorado al leer su libro ‘Por si las voces vuelven’ un relato en el que explica en primera persona su ingreso en un centro psiquiátrico después de un brote psicótico. Todos estamos expuestos a las enfermedades mentales, con lo cual, el hecho de conocer la historia de este personaje público hace más visible un ingreso que es más habitual de lo que creemos.

Así fue el cambio de Ángel Martín

 

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La vida del presentador y cómico Ángel Martín dio un giro radical en 2007, año en el que tuvo que ingresar en un psiquiátrico. Las voces y los delirios empezaron, Martín se pasó los primeros días atado a una cama, esperando que esos delirios que habían aparecido empezarán a remitir. El miedo a que se hiciera daño a él mismo o a los demás era enorme.

El éxito lo llevó a consumir determinadas sustancias que tienen graves efectos secundarios en la mente de las personas. Ángel era un hombre que lo había conseguido todo, trabajar en lo que le apasionaba y ser uno de los presentadores más queridos de la televisión. Pero detrás de su sonrisa se escondía una enfermedad latente que acabó estallando.

La actriz y pareja del presentador, Eva Fernández, fue la que dio la voz de alarma, al darse cuenta de que había voces en la cabeza de Martín que no se correspondían con la realidad. Tuvo un brote psicótico que pudo costarle la vida, pero acabó en un psiquiátrico. Hablaba con los perros y creía que era un astronauta de camino a una Luna que se hacía más y más grande.

Una realidad distorsionada que lo desconectó por completo del presente e hijo que Ángel Martín hiciera un parón necesario para poder curarse. Prestó la atención necesaria a una salud mental que había abandonado nada más empezar a consumir determinadas sustancias que pueden afectarle de lleno.

Gracias a los profesionales y a la medicación, Ángel Martín ha vuelto a ser el que era antes. Una persona muy querida por todos que ha relatado sus vivencias en un libro que es éxito de ventas y todo el mundo debe leer. Una obra maestra de un loco que todos podemos guardar dentro sin saberlo.

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