Las razones definitivas del porqué no pierdes peso como querrías

Ponerse a dieta no es tarea sencilla. Y mucho menos perder peso. Cada cuerpo es diferente y esto es una de las razones del porqué no pierdes peso como querrías porque establecemos un plan general que sirve para todos y creemos que no nos va a funcionar. Y esto, al final, es un error. ¿Qué podemos hacer?

No vemos resultados al momento y nos desmotivamos en seguida, necesitamos una importante fuerza de voluntad para seguir con ello. Verás cómo al final los resultados serán visibles antes de lo esperado.

Nunca hay tiempo

Es una excusa grande. Cuando pensamos en hacer dieta y en perder peso creemos que es algo fácil y banal, pero si se complica entonces la excusa perfecta es afirmar que no tenemos tiempo para empezar nunca, o lo iniciamos pero no lo mantenemos por esta excusa que no es más que eso. Si queremos, podemos.

Un plan mal establecido

Hay quienes se plantean un calendario de comidas para adelgazar (algo que está bien de inicio) pero está mal establecido. Los planes deben ser personalizados porque cada uno tenemos un cuerpo distinto, y unas necesidades también diferentes que nos motivan a adelgazar.

Sin deporte

Si comemos de manera saludable pero no nos movemos prácticamente, nuestra vida acaba siendo sedentaria y esto significa que no vamos a quemar las  comidas y las cenas. No hay nada mejor que establecer un plan donde fijemos que comemos diariamente y también haya el ejercicio que debemos hacer cada día o al menos algo aproximado de lo que estableceremos cada semana.

Nos dejamos arrastrar por la ansiedad

Sabemos que no es nada fácil dejar de picar aquellos alimentos que más nos gustan. O que de pronto tenemos estrés por el trabajo, nos da ansiedad y vamos directos a la nevera a buscar aquello que nos gusta más. Bien, pues controlar lo que comemos es algo mental. Si no tenemos suficiente fuerza de voluntad entonces debemos buscar ayuda de un psicólogo, los hay que tratan el tema alimentario.

Seguimos sin una rutina

Trabajamos, comemos, salimos, volvemos a comer y cenamos a las tantas. Una vida algo descontrolada en cuanto a las comidas no ofrece nada bueno para nuestro organismo y difícilmente reduciremos grasa.

En este sentido y, si lo que queremos es adelgazar bien, una de las razones definitivas del porqué no pierdes peso como querrías, es porque no sigues un orden y un horario para las comidas. Almorzar y cenar siempre  a la misma hora nos ayuda a mantener un orden, y a realizar cenas más ligeras que permiten una mejor digestión posterior.

Nos obsesionamos y lo queremos ya

La obsesión no nos conduce a ningún lugar. Si lo hacemos podemos empezar motivados, pero a medida que pasen los días, la obsesión es tanta que no nos permite seguir como esperamos. Esto puede convertirse en un problema importante y desembocar en un problema psicológico.

Nos saltamos nuestro menú un día

Y dos y tres, porque así se empieza. Pensamos que con un día no pasa nada y cuando nos hemos dado cuenta ya ha pasado una semana en la que nos hemos saltado la dieta y estamos como antes.

Fuerza de voluntad

Debemos ser conscientes de que aquello que queremos, cuesta. Por tanto es importante tener fuerza de voluntad si queremos ver los resultados que ansiamos. Ya sabemos que esto va a tardar porque nadie ha perdido peso de un día para otro. La paciencia es otra de las razones del porqué nunca acabamos nuestro plan alimenticio, lo queremos todo ya, al momento y esto no puede ser.

Buscar ayuda para que un nutricionista nos establezca un plan, un seguimiento de nuestros movimientos, nos ayude a no picar entre horas y a controlar la ansiedad que no nos deja avanzar.