Vuelve el riesgo de guerra nuclear
Hace un par de lunes todos respiramos algo más aliviados tras ver que las tensiones entre Corea del Norte y Estados Unidos se calmaban. El dictador Kim Jong-un clarificó que había un plan de ataque a Guam, pero que su ejecución dependía del comportamiento de Estados Unidos. La resignación de Steve Bannon, hasta ahora jefe de estrategia de la Casa Blanca, unido a que el 21 de agosto, Corea del Sur y Estados Unidos, empiezan ejercicios militares a gran escala en la Península de Corea. Esto siempre ha enfurecido a Corea del Norte y, en ciertas ocasiones, ha causado una demostración de fuerza por su parte. Con las tensiones como están es probable que la respuesta de Kim no sea muy amigable.
Empezamos con Steve Bannon. El mismo Bannon siempre ha dicho que él era el principal opositor de un conflicto armado con Corea del Norte, ya que por muy rápida que fuera la victoria, el número de muertes en Corea sería inaceptable. Otros como John F Kelly, jefe de gabinete y general del Cuerpo de Marines, prefieren la opción de eliminar tensiones con una buena guerra. Ahora, tras la marcha de Bannon, Trump sólo tendrá al marine susurrándolo consejos al oído.
Por otro lado, 30.000 soldados estadounidenses y 50.000 surcoreanos van a simular una guerra con Corea del Norte en la Península de Corea en lo que llaman “juegos de guerra”. Desde Washington ya han dicho que estos ejercicios pueden tener como respuesta otra prueba de misiles balísticos intercontinentales por parte del vecino del norte. Si esto ocurriera, Estados Unidos tendría que responder con más amenazas y sanciones, con lo cual volveríamos a la situación del viernes pero con mucha más tensión.
China y Rusia han urgido a Estados Unidos que haga un pacto con Corea del Norte donde el país asiático paralice sus pruebas de misiles y armas nucleares a cambio de que Estados Unidos deje estos ejercicios militares a gran escala en la Península. Estados Unidos se niega porque dice que esto daría una ventaja a los norcoreanos, que seguirían entrenando, en caso de guerra. Corea del Norte, a través de los medios de comunicación estatales, ha declarado que estos “juegos de guerra” van a convertir la situación de Corea en una catástrofe. El mensaje no es muy descriptivo pero suena que para la semana que viene el drama coreano vuelve a empezar y con ello, seguramente, la volatilidad en los mercados.