En qué quedamos, Sánchez: ¿Agenda 2030 o Agenda 1936?

Agenda 1936

Pedro Sánchez cree haber encontrado en la Guerra Civil un filón electoral y ahora pretende culminar su plan -aplazado en su día por las elecciones generales- de nacionalizar a los descendientes de los brigadistas que combatieron por el bando republicano en la Guerra Civil. Se trata de una reclamación de la llamada Ley de Memoria Democrática que lo que busca es captar votos, aunque la estrategia tenga dudosa eficacia, en parte porque la permanente obsesión del jefe del Ejecutivo por volver al pasado viene envuelta de un tufo electoralista que apesta. Después de grabarse rodeado de restos óseos en el Valle de los Caídos -todo un ejercicio de necrofilia ideológica-, el presidente parece decidido a dar el siguiente paso.

El artículo 33 de la Ley de Memoria Democrática -aprobada gracias a los proetarras de Bildu- permite conceder la nacionalidad española a los voluntarios que integraron las Brigadas Internacionales y, además, a sus «descendientes». Los voluntarios, por razones obvias -han pasado casi 90 años- no podrán verlo, pero sí sus hijos y nietos, a quienes se les otorgará la nacionalidad siempre que «acrediten una labor continuada de difusión de la memoria de sus ascendientes y la defensa de la democracia en España».

Los cálculos de los historiadores cifran en unos 35.000 los brigadistas internacionales procedentes de 60 países que, en octubre de 1936, llegaron a España para luchar del lado del bando republicano. La Ley de Memoria Democrática de Pedro Sánchez retoma la promesa que el entonces presidente del Gobierno de la República, Juan Negrín, hizo en 1938 a los brigadistas: «El Gobierno español quisiera testimoniaros de una manera directa su agradecimiento. Vuestro espíritu y el de vuestros muertos nos acompaña (…). El Gobierno de la República reconocerá y reconoce a los internacionales, que tan bravamente han luchado con nosotros (…) el derecho a reclamar, una vez terminada la guerra, la ciudadanía española. ¡Con ello nos honraremos todos!». Este Gobierno que presume de Agenda 2030 se ha confundido de fecha: querrá decir Agenda 1936.

Lo último en Opinión

Últimas noticias