¿Qué humedad debe tener la comida de tu perro?

La humedad de la comida de tu perro no solo ayuda a reforzar su hidratación, sino también hace que sea más palatable y digerible. En estado natural, la dieta de los canes posee cierta humedad, pues los tejidos, la grasa e, inclusive, los huesos de las presas contienen agua. Ello significa que, al comer, el can también ingeriría una cantidad de líquidos que son esenciales para el desarrollo de todas sus funciones orgánicas. Pero a partir del momento en que elegimos un pienso como base de la dieta canina, esta humedad inherente al alimento disminuye significativamente. En consecuencia, debemos estar muy atentos para garantizar la óptima hidratación de su organismo.

La escasa humedad en los piensos y sus consecuencias

Tantos años de estrategia publicitaria alrededor de los piensos de mascotas nos han hechos creer que esta es la mejor (sino la única) dieta balanceada para un perro doméstico. Pero la realidad nos muestra que elegir una alimentación seca implica ciertas complicaciones en la rutina del perro (y de su tutor).

Para evitar la proliferación de microorganismos patógenos, los piensos industrializados contienen entre 8 y 14% de humedad en sus fórmulas. Considerando que el cuerpo de un ser vivo está compuesto por, mínimamente, un 70% de agua, estos porcentajes quedan muy lejos de la humedad que debe tener la comida de tu perro. O al menos, de la dieta que su organismo está biológicamente preparado para asimilar.

Esta escasa humedad también hace que el alimento se vuelva menos apetecible y dificulta su aprovechamiento nutricional. La comida seca no es atractiva para ellos como los alimentos frescos, ni tampoco puede ser digerida con tanta facilidad. Los órganos del aparato digestivo también necesitan agua para metabolizar los alimentos y asimilar correctamente los nutrientes.

No es una sorpresa que muchos canes tengan dificultad de adaptarse a un pienso, o bien se cansen de consumirlo después de un periodo de tiempo. Como tampoco es coincidencia que los problemas dentales en perros se hayan multiplicado en las últimas décadas. La comida seca tiende a acumularse entre los dientes y encías, facilitando la formación de sarro y placas bacterianas, que conllevan a enfermedades bucales dolorosas, como la gingivitis y la periodontitis.

¿Cómo garantizar la óptima humedad en la comida de tu perro?

Una forma sencilla de mejorar la humedad en la comida de tu perro es cambiar la alimentación 100% seca por una húmeda o semiseca. Ya existen productos industrializados que apuntan a este tipo de nutrición. Solo para mencionar un ejemplo, tenemos las clásicas latas de alimento húmedo para perros, que contiene al menos un 30% de humedad.

Pero cada vez más tutores optan por los beneficios de una alimentación natural y casera. Ello les permite tener más control sobre el origen y la calidad de los alimentos, así como mejorar la versatilidad, el sabor y la textura de la comida de sus perros. Además, las dietas BARF son especialmente favorables para prevenir problemas dentales y trastornos gastrointestinales.

Así mismo, es importante contar con la orientación de un veterinario a la hora de elegir el tipo de dieta más beneficioso para tu peludo. Un profesional capacitado te ayudará a proveer una nutrición completa y equilibrada, llevando en cuenta la edad, la contextura física y el estado de salud de cada animal.