Aves migratorias: la cigüeña blanca

La cigüeña blanca ha inspirado historias mitológicas que hacen parte de la cultura de muchas regiones. ¿Quién no ha escuchado que los bebés viajan envueltos en un pañal que cuelga desde pico de una cigüeña blanca hasta llegar a sus hogares? Esta imagen es parte del inconsciente colectivo en Occidente y sigue vigente al día de hoy. Pero más allá del folclore, vale la pena conocer un poco más sobre los hábitos y las características de estas aves migratorias de largas distancias. A continuación, vemos un poco más sobre el tema.

Cigüeña blanca: taxonomía y características físicas

Las cigüeñas son aves grandes, de patas largas y pico grueso que pertenecen a la familia de los cicónidos (Ciconiidae). Actualmente, las 19 especies de conocidas son clasificadas en 6 géneros distintos. Aunque solo las especies del género Ciconia suelan considerarse estrictamente como cigüeñas.

Dentro de este género, se encuentra la cigüeña blanca (Ciconia ciconia), que es probablemente la especies más reconocida de la familia. Su aspecto y sus hábitos han inspirado muchas leyendas principalmente en Europa, donde su población estaba ampliamente extendida.

Se trata de un ave muy grande, que puede alcanzar unos 125 cm de altura y 115 cm de longitud. La envergadura de sus alas es aún más impresionante, soliendo registrar entre 155 y 215 cm. También destaca el pico grueso y puntiagudo con notable brillo, y las patas largas que adquieren una tonalidad rojiza en los adultos.

Como el nombre sugiere, el plumaje de estas aves es mayormente o integralmente blanco. Pero muchos ejemplares tienen plumas de vuelo y coberteras de las alas en color negro.

Hábitat y alimentación de las cigüeñas blancas

En la actualidad, se reconocen dos subespecies de cigüeñas blancas. La primera (nominal), C. c. ciconia, habita principalmente en Europa. Pero su área de anidación también incluye algunas regiones del noroeste de África y Asia occidental. Estas aves migran largas distancias para pasar el invierno en el sur del continente africano (especialmente cerca del desierto del Sahara) o en India.

La segunda subespecie, C. c. asiática, es un poco más grande que la primera y anida principalmente en Turkestán. Antes de la llegada del invierno, migran hacia la región que se extiende desde Irán hasta la India.​

Respecto a la alimentación, la cigüeña blanca es un animal carnívoro. Su dieta suele incluir casi todo tipo de presa disponible en su hábitat. Insectos, reptiles, peces, anfibios, pequeños mamíferos, e incluso otras aves de menor tamaño.

Reproducción de la cigüeña blanca

Las cigüeñas son aves monógamas, aunque no necesariamente mantienen la misma pareja de por vida. Los cambios en la composición de las parejas suelen ocurrir solo durante la primera fase de la época reproductiva. Y esta empieza con la llegada de la primavera en el Hemisferio Norte.

Sus grandes nidos se construyen sobre los árboles principalmente en zonas agrícolas con acceso a humedales. No obstante, también pueden aprovechar edificios y otras construcciones para anidar, cuando están más cerca de entornos urbanos.

Las parejas de cigüeñas suelen realizar una única puesta cada año, que generalmente consta de unos cuatro huevos. Los ejemplares jóvenes alcanzarán la madurez sexual alrededor de sus años y su esperanza de vida ronda los 35 años.