Maestre y Maroto pasan de oponerse a soterrar la A5 a reclamárselo a Almeida

Volantazo de Más Madrid y el PSOE en relación con el soterramiento de la autovía A5. Rita Maestre y Reyes Maroto han pasado de oponerse al mismo a reclamárselo al alcalde José Luis Martínez-Almeida. Se trata de unas las discusiones urbanísticas más importantes abiertas en la capital. Los problemas para los vecinos de esa entrada a Madrid son constantes. La izquierda, el pasado mandato mientras gobernó, se oponía a crear túneles y optaron por colocar unos polémicos semáforos que agravaron el problema de tráfico y atascos. Se retiraron a los cuatro meses. Ahora Más Madrid y PSOE se unen a los vecinos que llenan las calles urgiendo a realizar el proyecto subterráneo.

Hace unos días más de medio millar de vecinos de Batán, Casa de Campo y Campamento se manifestaron por la tardanza del Ayuntamiento en realizar estas obras. Llegaron a cortar parte de la A5 como protesta por los ruidos y la contaminación de la autovía. Allí estaban las candidatas del PSOE a la Alcaldía de Madrid y de Más Madrid, Reyes Maroto y Rita Maestre, que paradójicamente hace sólo unos meses consideraban que soterrar era una obra megalómana que no procedía.

La protesta fue convocada por la Asociación de Vecinos de Latina. Argumentaban que estaban «cansados» de ser considerados «ciudadanía de segunda y de que se utilicen sus necesidades como elemento propagandístico durante las campañas electorales, sin que exista intención real de mejorar los barrios».

Maestre y Maroto unen ahora sus voces a estos vecinos y, en lugar de entonar el mea culpa porque el mandato pasado con Manuela Carmena fallaron con su solución, exigen cuentas a Almeida. Ahora la izquierda se agarra al extremo de que el PP sí llevó este proyecto en su programa electoral y no ha podido cumplir esa promesa a tiempo.

Las asociaciones vecinales, en esa línea, señalaron que el Ayuntamiento «no ha iniciado las obras, no están presupuestadas y, a pesar de las numerosas ocasiones en las que las asociaciones lo han solicitado, no se ha compartido ningún proyecto». «El uso indebido del Paseo de Extremadura, una vía urbana, como vía rápida, es un atentado continuo contra las personas residentes en el distrito, ya que genera innumerables problemáticas que dificultan vivir con dignidad», detallan los vecinos, que contextualizan: más de 130.000 vehículos usan a diario esta vía junto a sus viviendas.

Estiman que «sus malos humos y ruidos afectan a más de 50.000 personas que residen en Lucero, Batán, Campamento, Aluche, Cuatro Vientos y Las Águilas, barrios que atraviesa y, como una fractura abierta que no cicatriza, los divide, generando enormes problemas de movilidad en sus gentes».

«Manuela Carmena finalizó su mandato sin ejecutar su plan de transformar la A5 a su paso por el distrito en una avenida urbana y José Luis Martínez-Almeida concluirá el suyo sin realizar su proyecto de soterrar la autovía entre la Avenida de Portugal y la Avenida de los Poblados. El actual equipo de Gobierno ha paralizado esta iniciativa ante el arranque de la recientemente aprobada Operación Campamento, con el argumento de que la ejecución de ambos proyectos iba a causar enormes molestias en la población», remarcan.

En marcha

Por su parte, Almeida ha prometido a los vecinos de Lucero que el soterramiento de la A5 «se acabará ejecutando sin ninguna duda» porque «el proyecto ya está redactado y es lo más importante de todo». «Los vecinos de toda esta zona tienen la seguridad de que hay un proyecto redactado, contratado por el Ayuntamiento de Madrid y que, por tanto, estaríamos en condiciones de poder iniciar la obra. No obstante, la Operación Campamento nos brinda una extraordinaria oportunidad de poder hacer ese soterramiento no hasta la Avenida de los Poblados, sino hasta la M40», expresó el primer edil, como recoge Europa Press.

El Ayuntamiento de Madrid envió en septiembre al Ministerio de Transportes el proyecto para soterrar la A-5 hasta la M-40 para incluirlo en la Operación Campamento y homogeneizar ambas propuestas. El Gobierno municipal, además, aprobó entonces la modificación del contrato por el relanzamiento de la Operación Campamento, por la que se hacía inviable «desde el punto de vista de la capacidad y la movilidad» la configuración determinada por el proyecto, así como por las dificultades técnicas sobrevenidas para el paso de la Línea 5 de Metro. La modificación del trabajo es un gasto de 461.471 euros, por lo que el importe total asciende a los 3,53 millones. Las constructoras seleccionadas para ejecutar este plan cuentan con tres meses más para modificarlo.

Por su parte, la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, también comprometió esta nueva infraestructura. Espera que el soterramiento de la A5 «se lleve a cabo porque es una prioridad» y demanda al Ejecutivo de la Nación que agregue en sus Presupuestos una cuantía específica para cofinanciar las obras.