La revista francesa que fue acribillada por islamistas se mofa de la ceremonia de inauguración
Charlie Hebdo se ha sumado a las críticas a la ceremonia olímpica
La revista fue víctima de un grave atentado islamista en 2015
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La ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de París sigue trayendo cola en el país vecino. Esta vez ha sido la famosa revista Charlie Hebdo quien se ha mofado sin piedad del espectáculo ‘woke’ del río Sena que dejó anonado al mundo entero la semana pasada. La portada es tan gráfica que se hace innecesario comentarla y cumple la máxima de que una imagen vale más que mil palabras. «¡La ceremonia de clausura será aún más bella!», se puede leer junto a la contundente ilustración de la portada.
Charlie Hebdo es un símbolo de libertad de expresión en Francia, sobre todo desde que sus trabajadores fueran víctima de un infame atentado hace nueve años. La publicación era la única con arrojo para meterse con los extremistas islámicos y, después de mucho tiempo recibiendo amenazas, los peores temores se hicieron realidad el 7 de enero de 2015.
Aquel día, dos terroristas encapuchados, provistos con fusiles de asalto entre otras armas, irrumpieron en la sede de la revista al grito de «¡Alá es grande!», disparando a todo lo que se movía. El balance fue letal: dejaron 12 muertos y 11 heridos. Los asesinos, miembros de una célula de Al Qaeda, fueron localizados y acribillados por la policía francesa dos días más tarde. El atento conmocionó a Francia y millones de personas se echaron a las calles en diversas manifestaciones de repulsa bajo un lema que se hizo mundialmente famoso: Je suis Charlie (Yo soy Charlie).
Charlie Hebdo tiene 55 años de historia y desde el principio destacó por su ateísmo e izquierdismo, así que en Francia había expectación con su postura ante la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos. Su respuesta ha sido inequívoca: una burla muy contundente a un espectáculo que levantó sorpresa y rechazo a partes muy iguales.
Polémica ceremonia de inauguración
En lugar del habitual desfile en el estadio olímpico, en estos Juegos la ceremonia de apertura se celebró por primera vez en la propia ciudad, pero a los organizadores se les fue de las manos el espectáculo con sus ansias de impresionar al personal. Tampoco ayudó la intensa lluvia que cayó durante toda la tarde y noche del pasado viernes, en el momento más inapropiado.
En una de las actuaciones de la inauguración, aparecieron varios drag queens y otros artistas que se pusieron a representar ‘La última Cena’, la famosa obra de Leonardo da Vinci. La imagen corrió como la pólvora, prendió en las redes sociales y arreciaron las críticas por la imitación de una escena fundacional del cristianismo.
En Francia están todavía que trinan por la imagen que dieron en una ceremonia de inauguración que les granjeó más críticas de las esperadas. «Está claro que nuestra intención no era faltar al respeto a ningún grupo religioso. Al contrario, nuestra intención era mostrar tolerancia y comunión. Si alguien se ha sentido ofendido, le pedimos disculpas», declaró Anne Descamps, la directora de Comunicación de los Juegos.
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