'BÁRBARALEAKS'

Las excusas de Juan Carlos I para no conseguirle un trabajo a Bárbara Rey: «No tengo la varita mágica»

Ver vídeo
Ángel Moya

Los audios de las conversaciones entre Juan Carlos I y Bárbara Rey muestran la insistencia de la vedette en que el monarca le consiga un trabajo. «De repente suena el teléfono. Lo cojo yo, sale una señora y me dice: ‘Yo soy la madre de Bárbara’», le cuenta el Rey emérito a la actriz. Ella se sorprende, pero le acaba pidiendo que la enchufe en Televisión Española. El ex Jefe del Estado le explica que no tiene «la varita mágica» para colocarla en el ente público y le pide que tenga mucho cuidado con las agendas.

Juan Carlos I.- La pobrecita… preocupada por su hija: «¡Por Dios, búsquele un trabajo! ¡Por Dios! Yo no quiero más que que mi hija trabaje, porque es muy buena…». «¡Me lo va a decir usted a mí», le digo.

Bárbara Rey.- Pero, ¡por Dios!, cómo te ha llamado para…

Juan Carlos I.- Yo… Me ha dado pena. Le he dicho: «Mire, escriba una carta a Manuel Bretón [ex secretario personal del Rey] y entonces yo trataré de ver si la puede recibir dentro de tanto, porque yo ahora me voy a Mauritania, voy fuera y no sé que…». Pero no le digas nada, por favor te lo pido…

Lejos de enfadarse con Bárbara por la indiscreción de su madre de llamarle, Juan Carlos I se muestra comprensivo y bondadoso. «No le digas nada, por favor te lo pido…», le dice a Bárbara para que no le deje en evidencia, como si fueran un matrimonio. La actriz simula no saber absolutamente nada de esa llamada.

En ese momento, Bárbara Rey se muestra aún más indignada por la indiscreción de su madre y Juan Carlos I cree que se trata de una indignación sincera e intenta justificar a la madre de la vedette: «Yo… Me ha dado pena. Le he dicho: Mire, escriba una carta a Manuel Bretón y entonces yo trataré de ver si la puede recibir dentro de tanto, porque yo ahora me voy a Mauritania, voy fuera y no sé que… Pero no le digas nada, por favor te lo pido».

Bárbara Rey.- Pero, ¡por Dios!, ¿cómo es posible? Ahora mismo la cogería y la mataría…

Juan Carlos I.- ¡No, no, no… por favor! Me ha pedido que no te lo diga.

Bárbara Rey.- ¿Ella te ha pedido que no me digas nada?

Juan Carlos I.- Sí.

Bárbara Rey.- Pues, de verdad, no entiendo por qué hace una cosa así… con un teléfono que ella no tiene por qué coger para nada porque no es… Vamos, que no… Porque si me lo ha cogido, me lo ha cogido de la agenda, y yo lo tengo por «Señor SUMER», ¿me entiendes?, que así nadie sabe…

Bárbara guardaba el teléfono del Rey en su agenda con el apodo que utilizaba el Rey Juan Carlos I con algunos conocidos, a los que se presentaba como «señor Sumer». Se trata de un acrónimo de Su Majestad el Rey.

Juan Carlos I.- Yo te digo, más que nada, porque todos los cuidados son pocos con agendas, o con notas, o con lo que sea…

Bárbara Rey.- Pero escúchame un momento. Tú sabes, yo tengo tu teléfono, que pone «Señor SUMER» y punto. Normal en mi agenda.

Juan Carlos I.- Yo ya le he dicho que los intentos que he hecho no han salido y yo… Yo espero que salga, lo que pasa es que no tengo la varita mágica en la mano.

El jefe del Estado justifica a la madre de Bárbara Rey e incluso llega hasta el punto de disculparse con la vedette por no haber colmado sus aspiraciones laborales: «Yo ya le he dicho que los intentos que he hecho no han salido y yo…, yo espero que salga, lo que pasa es que no tengo la varita mágica en la mano». «¿Y tú qué le has dicho?», le espeta Bárbara Rey al monarca, y éste responde: «Yo le he dicho que si quiere verme que escriba una carta. Le he dicho que por ahora no podía recibirla, pero que me escribiera una carta a través de Manuel Bretón, y tal, al Palacio de La Zarzuela. Yo me he quedado, de verdad, hasta muy enternecido. Yo lo estoy pasando mal de no conseguir eso. Lo digo de verdad. Y estoy tratando de ver cómo puedo conseguir algo, porque no es fácil».

Tras esas muestras de sorpresa e indignación por parte de Bárbara Rey ante el comportamiento de su madre, la vedette va directa al meollo de la cuestión y ahora es ella la que le pide favores al Rey: «Pues ya, hablando ahora de todo un poco, ¿en Televisión Española no hay alguien así que tú conozcas, o algo? Por ejemplo, para llegar a Colom (entonces director de Televisión Española). ¿Cómo? ¿qué sistema hay? Pero para llegar bien, no para llegar… Yo puedo llamar para pedirle una entrevista, ¿me entiendes? ¿Tú sabes de alguien?».

Lo último en Investigación

Últimas noticias