El ex jefe de gabinete de Artur Mas creó un fondo de inversión con un empresario del 3%
El ex jefe de gabinete y principal asesor del president Artur Mas, David Madí i Cendrós, ha sido socio hasta hace tres años del responsable de una de las empresas implicadas en la red de facturas falsas utilizadas para pagar comisiones a Convergencia a cambio de la adjudicación de contratos públicos.
Después de trabajar como director de comunicación y principal estratega electoral de Convergencia en los comicios autonómicos catalanes de 2006 y 2010, David Madí anunció que abandonaba la vida política para dedicarse a los negocios.
Tan solo unos meses después, el 10 de marzo de 2011, fundó la sociedad de inversiones Icat Desenvolupament junto a Joan Albert Arqués Fondevilla, gerente de la constructora Benito Arnó e Hijos.
Esta constructora ha recibido adjudicaciones millonarias del director general de Infraestructuras de la Generalitat, Joan Antoni Rosell, detenido el pasado miércoles por la Guardia Civil por su implicación en la trama de cobro de comisiones ilegales de Convergencia como director general de Infraestructuras de la Generalitat.
La detención de Josep Antoni Rosell
Benito Arnó también tiene una participación del 5,5% en la UTE Aguas Segarra Garrigues, que obtuvo el contrato de 1.102 millones de euros adjudicado por la Generalitat para ejecutar la mayor obra pública de Cataluña, una ambiciosa red de regadíos para las comarcas de Lérida. La UTE estuvo dirigida, durante varios años, por el propio Joan Antoni Rosell.
Pero además, como ha informado OkDiario, la constructora del socio de David Madí, Benito Arnó e Hijos, ha estado implicada en la red de facturas falsas que servían para pagar comisiones a Convergencia, el partido de Artur Mas.
Estas facturas eran emitidas por una sociedad con solo dos empleados radicada en Huesca, Interiorismo y Reformas Profesionales SL, cuyo administrador es el empresario de 81 años Diego Garzón Uribe, que actuaba como “testaferro” de los políticos beneficiarios del cobro de las mordidas.
Diego Garzón emitía estos documentos, por trabajos no realizados, a petición de una consultora de Mollerusa (Lérida) Engenyeria Inalba, dirigida por los hermanos Gonzalo y Esteban Niubó Mir. Las facturas emitidas por trabajos ficticios servían para dar cobertura legal a las disposiciones de dinero en efectivo que se destinaban a pagar sobornos a CDC o a altos cargos de este partido.
Las facturas del Canal Segarra Garrigues
La empresa del «testaferro» Diego Garzón emitió entre 2010 y 2012 a Benito Arnó e Hijos, la constructora de Joan Albert Arqués, cuatro facturas que suman 322.387 euros por supuestos “trabajos de maquinaria y personal en la red de distribución del sector 3 del canal Segarra Garrigues”. La empresa de Diego Garzón -que mantiene abierta una investigación de la Agencia Tributaria por estos hechos- jamás realizó dichos trabajos, porque solo tiene dos empleados y su objeto social es la «compra y venta mayorista y minorista de frutas», los servicios de decoración y limpieza, y el alquiler de maquinaria agrícola, entre otras actividades.
El gerente de la constructora que abonó oficialmente estas facturas falsas, Joan Albert Arqués, ha sido hasta el 9 de julio de 2012 consejero y secretario del consejo de administración de Icat Desenvolupament, la sociedad inversora creada junto al ex asesor de Artur Mas David Madí.
Tras asociarse con David Madí, la constructora de Arqués ha recibido contratos del director general de Infraestructuras de la Generalitat, Josep Antoni Rosell -detenido el pasado miércoles- como la remodelación de la nueva sede del Departamento de Bienestar Social en la calle Taulat (por 5,1 millones de euros), la construcción de un instituto de Secundaria en Sant Vicenç de Montalt (por 4,2 millones) y una de las fases de la prolongación del ferrocarril en Sabadell (por 9 millonesd).
Madí está considerado como el principal motor de la carrera política de Artur Mas y uno de los arquitectos de su proyecto independentista. Fue su jefe de gabinete entre 1996 y 1999, cuando Mas era el conseller de Economía del Govern presidido por Jordi Pujol.
Posteriormente, a partir de 1999, David Madí fue el secretario de comunicación y director de la oficina del portavoz de la Generalitat. Ha sido también el principal estratega de las campañas electorales de Convergencia en 2006 y 2010.
Está considerado como una de las personas más próximas al presidente Artur Mas, junto a su conseller de Presidencia, Francesc Homs, y al actual conseller de Justicia Germà Gordó. Como ha informado OkDiario, uno de los empresarios detenidos la pasada semana en la operación policial contra la financiación ilegal de CDC, el constructor Xavier Tauler, confesó ante el juez que negoció con Gordó el pago de comisiones a cambio de la adjudicación de obras públicas.
El padre del «derecho a decidir»
Tras abandonar la actividad política, en 2010, David Madí se ha convertido en un asesor al que se disputan las grandes compañías. Tras fundar el fondo de inversión ICAT Desenvolupament junto al gerente de la constructora Benito Arnó, Madí fue designado en julio de 2011 presidente del consejo asesor de la eléctrica Endesa -controlada por el grupo italiano Enel- en Cataluña.
Además, ha sido fichado como director del área de consultoría estratégica de la auditora Deloitte en Barcelona. Tras su fichaje, esta firma ha logrado multiplicar sus contratos con la Generalitat: pasó de facturarle 10 millones en el último mandato del tripartido catalán, a superar los 40 millones durante la reciente etapa de presidencia de Artur Mas, del que fue asesor personal.
En diciembre de 2013 también fue reclutado como consultor de Telefónica. Madí compatibiliza todos estos cargos con la vicepresidencia de la operadora de estaciones de la inspección técnica de vehículos (ITV) Applus.
Pese a esta intensa actividad en el mundo de los negocios, se sigue asociando a David Madí como uno de los principales consejeros de Artur Mas y se le atribuye la creación de la expresión «derecho a decidir», acuñada por CDC como eufemismo del proceso de independencia. Madí es además nieto de Joan Baptista Cendrós, uno de los fundadores de Òmnium Cultural, la asociación que ha impulsado junto a la Asamblea Nacional Catalana (ANC) el referéndum de independencia del 9N y la candidatura de Junts pels Sí.