Correa paró los pagos a Kinema y ordenó crear una empresa tapadera porque las cantidades eran «sospechosas»
El ex presidente del Gobierno de Ecuador, Rafael Correa, ordenó crear una sociedad pantalla para continuar desviando dinero público desde la Embajada de Ecuador en España. Esta maniobra se llevó a cabo en 2016, justo cuando terminaron los contratos a Kinema, la cooperativa de Podemos. Estos pagos se efectuaron desde el país andino a la entidad del partido de Pablo Iglesias por asesorar a los ecuatorianos que residían en España en materia de derecho hipotecario. Concretamente, sobre cómo evitar los desahucios.
Como ha publicado OKDIARIO, el Gobierno de Correa pagó 394.000 euros a Kinema, la cooperativa fundada por el diputado de Podemos Rafael Mayoral. Unos pagos que se llevaron a cabo, al menos, entre los años 2013 y 2014 a través de las oficinas diplomáticas de Ecuador en Madrid mediante varias transferencias bancarias. Sin embargo, los contratos arrancaron varios años antes. El primero de ellos se firmó en 2012 bajo la responsabilidad de Aminta Buenaño, en aquel momento embajadora. El último de estos pagos se hizo en 2016, ya con Miguel Calahorrano como embajador.
Tras la finalización del último contrato con Kinema, Calahorrano, ex ministro del Gobierno de Ecuador y de la máxima confianza del ex presidente Rafael Correa, recibió una llamada desde el Ministerio de Exteriores del país andino en la que le dieron instrucciones para que dejara de firmar contratos con la cooperativa de Podemos porque las cantidades que se le estaban adjudicando eran demasiado “sospechosas”. A partir de aquí, la estrategia consistía en idear otra manera de continuar desviando dinero público. Para ello, decidieron crear una empresa pantalla. Una ‘tapadera’ con la que poder seguir con el mismo modus operandi.
Tal y como ha podido saber OKDIARIO, el nombre de esta ‘tapadera’ es Mi País Consultores SL. Según el Registro Mercantil, esta empresa fue constituida el 26 de abril de 2016, nada más acabar el último de los contratos con Kinema. Por lo que ha podido averiguar este diario la compañía fue creada ad hoc para ser adjudicataria de contratos públicos, todos ellos ordenados desde Ecuador. Desde ese momento y hasta finales de ese mismo año, esta nueva empresa fantasma empezó a facturar a la Embajada de Ecuador en España con el mismo concepto que Kinema: asesoría jurídica sobre los desahucios.
El testaferro, en paradero desconocido
La hoja registral de la ‘tapadera’ revela el nombre de la persona a la que usaron de testaferro para que acudiera a un notario y al Registro Mercantil y se nombrara administrador único de la compañía: un ciudadano ecuatoriano llamado Walter Napoleón Jaramillo Lema. Hasta ese momento, Jaramillo, un inmigrante residente en Madrid desde comienzos de la década de 2000, se dedicaba a gestionar una agencia de viajes entre Ecuador y España para clientes con pocos recursos económicos. También tenía un pequeño negocio de envío de dinero a Latinoamérica.
El testaferro usado por el Gobierno de Correa para estar detrás de esta empresa pantalla ha tenido varios problemas con los tribunales españoles. De hecho, el 18 de agosto de 2020 el Juzgado de lo Social nº 2 de Valencia determinó que Jaramillo estaba “en ignorado paradero” al no presentarse ante un litigio judicial. De hecho, este testaferro aparece como denunciado a través de dos de sus sociedades. Una de ellas es la ‘tapadera’ Mi País Consultores SL.
Cinco años antes de esta citación judicial, la Consejería de Economía y Hacienda de la Comunidad de Madrid revocó a Jaramillo el título de licencia para trabajar a través de su agencia de viajes, llamada ‘Viajes Mi País’. Este periódico se ha puesto en contacto con Walter Napoleón Jaramillo Lema para preguntarle quién le ordenó crear la ‘tapadera’ y cuánto dinero ha facturado a través de ella gracias a los pagos de la Embajada de Ecuador en España. Sin embargo, en un tono nervioso, ha optado por no hacer ninguna declaración sobre el asunto.