Berlusconi firma un programa conjunto con el resto de centro-derecha italiano y quiere ser el candidato

El ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi ha firmado este jueves un programa electoral conjunto con los líderes de los partidos de centro-derecha de cara a las elecciones generales previstas para el 4 de marzo.

«Juntos ganaremos», ha aseverado a través de Twitter, donde ha anunciado que ha firmado un programa electoral junto al líder de la Liga Norte, Matteo Salvini, y la líder del nacionalista Hermanos de Italia, Giorgia Meloni.

A #PalazzoGrazioli ho appena firmato con @matteosalvinimi e @GiorgiaMeloni il programma elettorale del #centrodestra. Uniti si vince! #Unitisivince #elezioni2018 pic.twitter.com/6XNxeqYGXl

— Silvio Berlusconi (@berlusconi) 18 de enero de 2018

En el documento, los tres políticos se comprometen a recortar los impuestos y a dar marcha atrás a la reforma del sistema de pensiones del país, tal y como ha recogido la agencia británica de noticias Reuters.

No puede ser candidato

Las encuestas de intención de voto sugieren que la alianza, a la que se suma Forza Italia -el partido de Berlusconi- se hará con la mayoría de los escaños del Parlamento pero quedará lejos de hacerse con una amplia mayoría, lo que pone en duda la predicción sobre la formación final de un gobierno en coalición.

Los tres líderes han manifestado que prometerán llevar a cabo la introducción de un único impuesto plano. La Liga Norte ha situado dicho impuesto en torno al 15 por ciento, mientras que Berlusconi estima que este podría fijarse entre el 20 y el 25 por ciento.

El propio Berlusconi, que dimitió en 2011 tras verse envuelto en todo tipo de escándalos por su vida privada, ha afirmado este jueves que está dispuesto a volver a liderar el Gobierno si el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) anula la inhabilitación que pesa sobre él desde el año 2013 a raíz de una condena por fraude fiscal.

El bloque no ha acordado un candidato de consenso y, al menos hasta ahora, Berlusconi había dado a entender que no repetiría. La inhabilitación judicial que pesa sobre él le impide volver a ocupar un cargo público hasta el año 2019, pero ahora espera que el TEDH revise su caso.