Muere un ciudadano estadounidense en un bombardeo en el sur de Líbano
La congresista de Estados Unidos Rashida Tlaib ha acusado a la Casa Blanca de "no proteger a sus propios ciudadanos"
El estadounidense murió cuando "intentaba salvar vidas inocentes en Nabatiye"
El curso del conflicto en Oriente Próximo entre Israel y Hezbolá y sus aliados ha dejado este jueves una nueva víctima, un ciudadano estadounidense que ha muerto en el sur de Líbano, en medio de la invasión del territorio, en un bombardeo ejecutado por el Ejército israelí. Por el momento, no se han pronunciado ni las autoridades del país hebreo ni las de Estados Unidos.
La noticia ha sido confirmada por la congresista estadounidense Rashida Tlaib, que ha acusado a la Casa Blanca de «dejar atrás a los estadounidenses y no proteger a sus propios ciudadanos».
El fallecido ha sido identificado como Kamel Ahmad Jawad, ciudadano del estado de Michigan. Según las declaraciones de su hija, Nadine Jawad, murió cuando «intentaba salvar vidas inocentes en Nabatiye», una localidad situada en el sur de Líbano.
«Nos honra el sacrificio de mi padre. Durante sus últimos días, eligió quedarse cerca del principal hospital en Nabatiye para ayudar a ancianos, personas con discapacidad, heridos y aquellos que simplemente no podían permitirse económicamente una huida», ha detallado, aunque también ha querido aclarar que «nunca se vio a sí mismo como un salvador»: «Su respuesta al conflicto político siempre fue simple, la de ‘estoy con los oprimidos’. No estaba solo en esta lucha. Muchos otros, como él, arriesgan su vida a diario para aliviar el sufrimiento masivo».
También ha contado que «incluso en sus últimos momentos, estuvo tranquilo», para finalizar pidiendo que se respete la privacidad de su familia para que puedan vivir el luto por esta «pérdida significativa» con tranquilidad.
Militares caídos en combate
Además de la ofensiva aérea, el Ejército de Israel cruzó este miércoles la Línea Azul, la frontera que separa de facto los territorios, y se dieron combates y «enfrentamientos a corta distancia». En ellos se produjo la primera baja del Ejército israelí, la de un soldado de 22 años, comandante de equipo en la unidad Egoz, especialistas en guerra de guerrillas. Horas después, las autoridades hebreas confirmaron que los militares caídos en combate eran, al menos, ocho, todos ellos de entre 21 y 23 años.
Las fuerzas israelíes confirmaron, por otro lado, el despliegue de la 36ª División, la más poderosa de su Ejército. Ga’ash (como se le conoce popularmente-«rabia»-) incluye a los miembros de la Brigada Golani, la 188ª Brigada Blindada, la Brigada Etzioni y otras fuerzas» que se suman a la «operación selectiva y demarcada en el sur de Líbano contra infraestructuras y objetivos terroristas de Hezbolá». La 36ª División es el contingente acorazado y de infantería más potente de Israel, y ha participado en conflictos como la Guerra de los Seís Días o la de Yom Kipur. La ofensiva recibirá el apoyo de la fuerza aérea y de la artillería.
Lance Corporal Haidar is among 148 residents we have been desperately trying to help evacuate from Lebanon. One of my constituents was already killed in an Israeli airstrike.
The @StateDept is leaving Americans behind and failing to protect their own citizens. https://t.co/Sljpbd1Pf8
— Congresswoman Rashida Tlaib (@RepRashida) October 3, 2024